Por Marcelo Peralta Martínez
[email protected]

Hace pocos días un inesperado descubrimiento, revelado a través de un estudio realizado en Polonia por miembros del Proyecto de Momias de Varsovia, sorprendió al mundo al revelarse que la persona embalsamada exhibida en su sarcófago, en el Museo Nacional de Varsovia, no pertenece a un sacerdote sino que se trata del cuerpo de una mujer que fue momificada en avanzado estado de gestación.

Los científicos polacos que hicieron el hallazgo indicaron que este hecho es el único ejemplo conocido en el mundo de una momia egipcia embarazada. ¿Qué hay detrás de esta historia?

La investigación

La noticia se dio a conocer en el Journal of Archaeological Science, en la que se revela que esta mujer egipcia embalsamada que está expuesta desde 1917 en el Museo Nacional de Varsovia, y tiene más de 2.000 años de antigüedad estaba embarazada y lo que se creía en realidad era que en ese lugar descansaban los restos de un sacerdote, debido a que los jeroglíficos (ver recuadro) de su ataúd tenían ciertas referencias religiosas no eran tal.

Si bien ahora se explica en algunas palabras, el estudio comenzó en 2015, y llevó tiempo determinar la compleja situación. Luego de explicar los equipos que utilizaron, como escáneres y ecógrafos, y como la tecnología les permitió dar con el hallazgo. Marzena Ozarek-Szilke, antropóloga y arqueóloga de la Universidad de Varsovia recordó: “Mi marido Stanislaw, egiptólogo, y yo misma, al examinar las radiografías vimos en el vientre de la fallecida una imagen familiar para unos padres de tres hijos, ¡un pequeño pie!”

Tras indicar que “este hallazgo es el único caso conocido de una mujer embarazada embalsamada” subrayaron que todas las tareas se hicieron con aparatos que permiten trabajar de forma no invasiva para preservar las piezas, y que sigan siendo examinadas en el futuro.

El bebé y su destino

Según subrayaron los expertos, tras diferentes pruebas, análisis y testeos de rigor al dar con la presencia de un feto entero creen que podría tratarse de un bebé de entre 26 y 30 semanas, al tiempo que la edad de la mujer oscilaría entre los 20 y los 30 años, indicando además que esta falleció en el siglo I a.C.

Tras las pruebas recabadas surgió un nuevo misterio ¿Por qué fue momificada estando embarazada? Ozarek-Szilke y Stanislaw formularon una hipótesis que hace referencia a que quizá hubo un intento de camuflar su embarazo o bien esto pudiera tener un significado relacionado a las creencias del antiguo Egipto sobre la vida en el más allá. Lejos de quedarse con una sola voz, fue el experto de la Academia polaca de las Ciencias, Wojciech Ejsmond quien también habló al respecto: “No sabemos por qué no retiraron el feto del vientre de la difunta previo a su momificación. De lo que sí estamos seguros es que esta momia es única, completamente diferente a todo lo que conocíamos. No hemos encontrado ningún caso similar, ni tampoco hay registros de ellos, esto significa que “nuestra” momia embarazada es la única conocida en el mundo”.

Por último, Ejsmond quien también participó del proyecto manifestó que el caso es un disparador a un “amplio e infinito abanico de estudios tanto de las momias, y su origen o identificación, como del embarazo en la antigüedad”. Todo lo mencionado hasta aquí revela la existencia de un hecho absolutamente único en su totalidad, y hasta ahora nunca antes registrado y menos aun con las pruebas obtenidas.

NO ERA SACERDOTE
ERROR DE APRECIACIÓN

En el Museo Nacional de Varsovia, en Polonia creían que exhibían la momia de un sacerdote, pero era una mujer embalsamada. ¿Qué llevó a los expertos a determinar que era un hombre? Los jeroglíficos de su ataúd.

Según las escrituras se trataba de Hor-Djehuti, un religioso de Teba que podría haber fallecido entre el siglo I a.C. y el I d.C. En tanto, una versión cuenta que la embarazada embalsamada fue colocada en ese ataúd por comerciantes de manera que los expertos consideran: “es necesario un enfoque crítico de la interpretación de las momias egipcias, ya que muchas de ellas no coinciden con sus ataúdes”.

En las radiológias se veía una mujer con “larga y rizada cabellera, hasta los hombros”, al tiempo que “posiblemente provenía de la élite” debido a que “fue envuelta en telas costosas y rodeada de ofrendas y amuletos de valor”.