El Congreso de Perú aprobó esta noche el proyecto de reforma electoral y el adelantamiento de las elecciones generales para abril de 2024, tres días después de que la presidenta Dina Boluarte exigiera a los legisladores reconsiderar la votación al proyecto, porque había sido bloqueado el proyecto la semana pasada.

La aprobación de la medida es un intento del Poder Ejecutivo peruano por atenuar la crisis política y social, que desató la destitución de Pedro Castillo, y que alerta a organismos de derechos humanos.

De esta forma, con 93 votos a favor, 30 en contra y 1 abstención, el Congreso unicameral de Perú aprobó la iniciativa y por ende, se realizarán las elecciones en abril de 2024. Mientras que  el mandato de la actual mandataria cesaría el 28 de julio de ese año.

Luego, cabe mencionar que los congresistas cesarán su cargo el 26 de ese mismo mes, para dar espacio a la asunción de los legisladores que resulten electos en esos comicios generales.

Por otra parte, como bien detalla Télam, si esta iniciativa de mayoría era rechazada pasaría a tratarse una de minoría que proponía incluir en la votación la convocatoria a un referéndum para consultar al pueblo sobre la convocatoria a una Asamblea Constituyente.

Como bien se informó, el viernes pasado, el Congreso unicameral no logró la mayoría que exigía el adelanto de las elecciones, porque implica una reforma constitucional. Antes de que pudiera analizarse la reconsideración pedida, el debate fue suspendido por el titular del cuerpo, José Williams.

En este marco, la mandataria Boluarte descartó el sábado que vaya a renunciar y exigió al Congreso reconsiderar "la votación del adelanto de elecciones".

Finalmente, tenemos que recordar que  Perú registra una ola de protestas y manifestaciones masivas desde el 7 de este mes, cuando el Congreso destituyó a Pedro Castillo luego de que este anunciara la disolución del Parlamento y el establecimiento de un "gobierno de excepción" con suspensión de garantías constitucionales.

Sucedido por la hasta entonces vicepresidenta Boluarte, Castillo fue arrestado y la Justicia le impuso 18 meses de prisión preventiva por rebelión y conspiración, por entender que intentó dar un golpe de Estado.

Desde aquella jornada, una buena parte de la población peruana lleva adelante numerosas protestas para reclamar el adelantamiento de las elecciones generales, que estaban previstas para 2026. Y en ese contexto de episodios violentos con las fuerzas de seguridad murieron al menos 26 personas.