Una banda armada con explosivos y fusiles de guerra asaltó un banco, se tiroteó más de una hora con la policía, tomó rehenes y en la huida "regaló" 810.000 reales a la población, dejando caer en la calle billetes robados que equivalen a 150.000 dólares, en Criciúma, estado de Santa Catarina, a 600 kilómetros de la frontera con Misiones.

Una jornada de violencia extrema inédita se vivió en la ciudad, con dos policías heridos en el ataque, perpetrado por decenas de delincuentes que sitiaron el centro de Criciúma y cerraron sus calles utilizando a rehenes en la senda peatonal.

En su fuga, los delincuentes tiraron parte del botín robado a una sucursal del estatal Banco do Brasil (BB) y lanzaron a las calles billetes que según la policía sumaban el equivalente a 150.000 dólares.

Uno de los delincuentes que asaltó el Banco do Brasil tomada por las cámaras de seguridad.



Cuatro de las decenas de personas que a las 1.30 de la madrugada salieron a las calles a buscar el dinero que había "caído del cielo" fueron detenidas por hurto, dijo a la TV Globo el comisario Ulisses Gabriel. Hasta el momento, nadie fue detenido por el atraco ni se informó de muertos.

Barricada con rehenes que utilizó el grupo de asaltantes para evitar que entre la policía.



Criciúma, ubicada al sur de Florianópolis es famosa por sus fábricas de cerámica y azulejos, por tener un club de fútbol homónimo que llegó a estar en primera división en 2018 y que canta canciones de cancha en español, imitando a las hinchadas argentinas.

El año pasado tuvo relevancia nacional por haber sido sede del choque por la Copa Davis entre Brasil y Barbados, por la Zona Americana del torneo mundial de tenis por equipos.

"Esto nunca pasó en todo Santa Catarina. Usaron fusiles calibre .50 capaces de derribar helicópteros y decenas de kilos de explosivos. Creemos que es gente de fuera del estado que vino a cometer este golpe", afirmó el comisario.

Momento en que los delincuentes ingresaron al banco.

En videos subidos por vecinos a las redes sociales se ven algunas escenas del tiroteo, e incluso a rehenes sentados en las sendas peatonales sirviendo como escudos humanos para el escape de la banda, que usó diez automóviles.


Los autos eran todos robados y fueron encontrados en una ruta secundaria, escondidos en un maizal. Hasta el momento, el Banco do Brasil no se pronunció sobre el asalto a una de sus bóvedas en el interior de su principal sucursal en Criciúma.