Una pareja de rusos fue arrestada en Eslovenia bajo sospechas de que algo escondían: resultaron ser espías de élite con pasaportes falsos de "nacionalidad argentina", y por lo que se supo más tarde es que el supuesto viaje hacia Europa fue para escapar de la inseguridad del país.

Se trata de la pareja conformada por María Mayer y Ludwig Gisch, quienes en el año 2017 decidieron emprender vuelo hacia Liubliana, la capital eslovena, para radicarse allí y dejar atrás una supuesta vida en Argentina. Todo eso resultó ser falso.

Justamente, el pasaporte de ambos indicaba que eran argentinos y hasta el momento se desconoce quien falsificó las credenciales, pero se conoció que vivieron hasta el año pasado en el barrio de Belgrano. Los particular del caso es que sus vecinos señalaron a la pareja como "agradables" y "normales", sin nada sospechoso por esconder, ya que el matrimonio eligió un cambio de vida en el viejo continente por cuestiones de inseguridad en Argentina.

El pasaporte adulterado de Ludwig Gisch.

De hecho, los residentes cercanos indicaron que la pareja hablaba en español e inglés, y hasta sus propios hijos dialogaban en castellano, pero no tenían un dialecto fluido cuando se trataba del idioma esloveno. Un vecino se animó a hablar en un periódico local y dijo: “Hablo bien español y me di cuenta de que ella no tenía acento en español. Eran buenas personas ordinarias, no había forma de que fueran espías. Creo que todo es inventado por los medios”

Pero un día toda esa historia falsa se derrumbó. La policía investigó al matrimonio e identificó que pertenecen a un grupo de espías rusos de élite y con un historial de viajes extensos recopilando información de cada lugar por el que pasaban.

Espías rusos se hacían pasar por argentinos: ¿Cómo descubrieron a la pareja?

El barrio Črnuče de la capital eslovena donde habitaba el matrimonio se revolucionó cuando a principios del mes de diciembre la policía local, junto a grupos especializados de investigación luego del aviso de un servicio de inteligencia extranjero, allanó su hogar.

Según el medio inglés The Guardian, los oficiales encontraron una “enorme” cantidad de dinero en efectivo en su vivienda, y a partir de ese momento se descubrió que eran espías rusos de élite, conocidos como “ilegales”.

Este grupo de espías "ilegales" operan sin vínculos visibles con Moscú y pasan desapercibidos por no ser "diplomáticos". Estos agentes son especialmente entrenados por mucho tiempo para fingir ser extranjeros para recopilar información en el país de la misión. En la mayoría de los casos tienen hijos con nacionalidad falsa sin saber que tanto ellos como sus padres son de origen ruso.

En este edificio vivió la pareja rusa cuando estaban en Argentina.

La portavoz de la policía de Liubliana, Drago Menegalija, declaró a la prensa local que “los sospechosos son miembros de un servicio de inteligencia extranjero, que utilizaron documentos de identidad extranjeros obtenidos ilegalmente para vivir y trabajar en Eslovenia con identidades falsas y recopilar información en secreto”.

En las redes sociales de María Mayer figura que la pareja viajaba alrededor del mundo para mostrar sus obras de arte bajo el seudónimo galería 5'14, lo que podría resultar ser una pantalla para ocultar su verdadero motivo de los viajes. Lo mismo ocurre con su esposo, quien se dedica a manejar una empresa que ofrece software llamada DSM&IT y por eso volaba hacia distintos puntos para dar conferencias.

Sin embargo, la gran cantidad de dinero allanada en su hogar se sospecha que era utilizada para comprar a informantes, ya que los espías "diplomáticos" que se mueven por las embajadas podrían estar sujetos a vigilancia de rutina y correr el riesgo de que una de sus fuentes sea descubierta.