Paola Flores tenía 46 años y tras someterse a varios tratamientos de fertilización asistida había logrado quedar embarazada de mellizos. Al sexto mes, contrajo Covid-19 y se complicó su cuadro de salud. Diez días después de ser sometida a una cesárea la mujer falleció, sin poder conocer a sus hijos. Los bebés nacieron prematuros pero se encuentran en buen estado.

La mujer murió el 22 de junio en el Hospital Español de Godoy Cruz, en Mendoza, luego de sufrir una insuficiencia respiratoria progresiva que le provocó una falla orgánica múltiple. El cuadro de Paola se tornó delicado debido a que algunos medicamentos utilizados en tratamientos in vitro son trombóticos.

Los mellizos, una nena y un varón, de 16 días, están internados en el área de neonatología del centro de salud y están evolucionando bien, según el último parte médico.

Maternidad deseada y un desenlace fatal

Paola se había sometido a varios tratamientos de fertilidad para quedar embarazada, no estaba vacunada y terminó contagiándose de Covid-19. El único antecedente de riesgo que tenía era obesidad.

Después de transitar la enfermedad sin complicaciones, la mujer empezó a saturar menos oxígeno en sangre y fue trasladada a terapia intensiva.

“El equipo médico que la asistía resolvió que debía intubarla y antes de eso, había que realizar el parto porque corría riesgo la vida de los bebés, explicó a los medios el director del hospital que la atendió, Walter Vázquez.

Después de transitar la enfermedad sin complicaciones, la mujer empezó a saturar menos oxígeno en sangre y fue trasladada a terapia intensiva.

Paola cursaba su sexto mes de embarazo cuando los médicos de terapia intensiva decidieron realizar la cesárea para salvaguardar su salud y la de los bebés. Luego de su nacimiento, las criaturas fueron derivadas a terapia intensiva infantil y, más tarde a neonatología.

Pese al dolor por la pérdida de su mujer, Matías, el papá de los bebés, se mostró muy agradecido a todo el esfuerzo del personal del hospital. "Abrazaría a cada uno de los que han colaborado para salvarles la vida", dijo.

Las autoridades del hospital mendocino flexibilizaron el protocolo y le permitieron a él y a la familia visitar a los bebés con hisopados previos.

Paola trabajaba como bioquímica en el principal hospital materno de la provincia cuyana, el hospital Luis Lagomaggiore.