Con el objetivo de solucionar el "gran problema institucional" de la Argentina, desde el Movimiento Monárquico Argentino (MMA) proponen que se restablezca un sistema de corona y que una de las dos hijas mayores de la reina de Holanda, Máxima Zorreguieta,  sea la soberana del país, Amalia o Alexia. Mario Santiago Carosini es el presidente de la agrupación que presentará el proyecto ante el Congreso de la Nación Argentina.

El MMA surgió en 1987 y busca separar el gobierno del Estado y establecer en el territorio una monarquía con el objetivo de terminar con la "corrupción estructural y llegar a mejores índices de desarrollo, bienestar y nivel de vida", según expresó Carosini.

Los miembros de este movimiento pretenden que un rey sea quien controle al gobierno. Además, plantea que la Casa Real debería ser la Quinta de Olivos, y la Casa Rosada, continuar como sede del gobierno.

"La monarquía es el sistema más eficiente. Y el más barato también", explicó Carosini. En esa línea, señaló que en la Argentina el modelo a seguir no sería el de la corona británica o española, sino la de Suecia.

Según sostiene, el gasto sería muy pequeño y traería muchas soluciones al país. De acuerdo a sus cálculos, el financiamiento rondaría alrededor de los 10 millones de dólares por año, los cuales serían suficientes y ahorrarían al país "los 20 millones que se roban cada año". Y agregó: "Con lo que sobra se pueden bajar impuestos, para que la gente deje de sentirse asfixiada".

A pesar de que en sus redes sociales no cuentan con mucho apoyo, Carosini cuenta que en la Argentina hay cerca de un millón de monárquicos, en su mayoría de entre 20 y 40 años. En Facebook tienen 2.300 seguidores, en Twitter 674 y en Instagram 1.072.