En pleno desarrollo del Mundial de Qatar 2022, los futbolistas que no forman parte de la competencia aprovechan el tiempo libre para irse de vacaciones. Uno de esos deportistas es el jugador de Boca Luis Advíncula, quien se encuentra en Francia y vivió un insólito momento cuando intentó ordenar comida en un restaurante de lujo de París y se volvió viral.

El defensor de la selección peruana compartió lo sucedido en su cuenta de Instagram y desató las risas en las redes sociales. Cuando quiso pedir uno de los platos del menú, advirtió que la carta solo estaba en inglés y francés, algo que lo dejó totalmente desconcertado.

“Como cuando vas a un restaurante y no entiendes una mierd…”, escribió en su red social acompañando el texto con emojis de risas. De todos modos, la barrera idiomática no le impidió disfrutar de la belleza de la ciudad de las luces: "Ah, pero tienes linda vista”, agregó y mostró la impresionante vista nocturna de la Torre Eiffel iluminada. 

No obstante, sus problemas con el francés continuaron, ya que cuando Advíncula recibió su pedido, se encontró diversos ingredientes que inmediatamente provocaron las risas: “A ver, me vieron cara de cóndor porque de paloma no creo”, escribió.

Los seguidores del defensor de Boca saben a la perfección que el peruano suele publicar contenido gracioso en sus redes. Pues lo hizo a lo largo de su carrera, tanto en su seleccionado como en el resto de los clubes donde jugó.

El futbolista viajó a la capital de Francia junto a sus dos hijas y su novia, la modelo argentina Camila Castellán. Luis aprovechó el parate del fútbol argentino y que Perú no participa de la Copa del Mundo para descansar y vivir experiencias únicas con sus seres queridos. El jugador también visitó la sede de Disney World en París.

Vale la pena recordar que Advíncula tuvo un rol predominante en la no clasificación de Perú a Qatar 2022, pues el defensor erró su tiro en la tanda de penales en el partido del repechaje ante Australia. De hecho, tras el encuentro renunció al seleccionado, aunque luego recapacitó y volvió a ponerse la camiseta bajo el mando de Juan Reynoso.