Esta no es una historia paranormal. Es una historia de amor, de conexión, de una asombrosa coincidencia que, así como emocionó a la protagonista, estremeció a quienes la leyeron. "Dos almas que se aman, nunca, nunca se van a separar", destacó la joven en una parte de su hilo de Twitter. Bueno, este relato tiene que ver con eso, con lo espiritual, con lo sentimental y con la idea de que quienes ya no están en cuerpo, siguen en este mundo como energía.

Eve Iglesias utilizó su cuenta de Twitter (@EveIglesiass) para compartir su maravillosa experiencia una semana después de haber aprobado su tesis final en la universidad, cuando volvió a su pueblo para estar con su familia. Al entrar a su dormitorio, la chica vio un sobrecito escrito, al cual no le dio "mucha bola", según sus palabras, porque sus abuelos solían regalarle plata en ellos y pensó que era uno viejo y vacío que había quedado dando vueltas.

"Tengo varios por mi cuarto, como recuerdo", explicó la joven. Sin embargo, en una inspección más cercana, se dio cuenta de que en el sobre había dinero: "Si todavía tiene plata, es porque es nuevo, pensé". Entonces, lo abrió y se puso a leer la carta que había en el interior. Desde ese segundo, todo fue emoción y lágrimas...

"Me pongo a leer, y decía 'feliz fin de una etapa', firmado por mi abuela Cristi y mi abuelo Jorge, quien falleció en 2016.
Me emociono, porque pensaba que mi abuela le había pedido a mi mamá que me lo dejara ahí, y que firmó por los dos para felicitarme también en nombre de mi abuelo (lo siguió haciendo sólo por un tiempo después de que él falleciera)"
, escribió Eve.

La carta de la abuela y el abuelo para Eve, en la cual la felicitaban por terminar una etapa

"Bajo emocionadísima y le digo a mi mamá, a lo que ella me contesta, sin mirarme, 'ah, sí, lo encontré el otro día en mi mesita de luz mientras acomodaba, andá a saber de cuándo es'", agregó la joven, a continuación. Y acá es donde la historia dio otro giro estremecedor”'¿Qué? ¿Esto no es de ahora?'", le preguntó la joven a su madre, quien respondió: "'No. Estuvo guardado andá a saber hace cuánto...".

Eve se detuvo unos segundos, analizó la situación, hizo memoria y desentrañó lo que estaba ocurriendo. "La última vez que cerré una etapa fue hace 6 años, cuando terminé el secundario en 2016. Mi abuelo ya había fallecido, pero mi abuela aún ponía su nombre en las cartas", señaló la joven.

Y siguieron las conclusiones: "Entonces, ese sobre estuvo guardado 6 años. Tuvo SEIS años para que alguien lo encontrara. Podría haber salido en cualquier otro momento. Y llegó a mis manos uno de los días mas importantes para mí. Ni un día más, ni un día menos. Y no decia 'feliz cumpleaños', me felicitaba por haber finalizado una etapa, tal como estaba sucediendo ese día".

"Dos almas que se aman, nunca, nunca se van a separar"

Eve subrayó que su abuelo "fue el abuelo mas presente del mundo", que por eso cree que "se encargó de estar presente en ese momento, aún estando desde otro plano" y que todo esto solo demuestra que "el alma" de un ser querido fallecido "sigue con nosotros y lo único que se va es el cuerpo".

"Sigo flasheada. ¡Qué increíbles las conexiones! ¡Qué afortunada soy!", exclamó la chica, quien reservó las últimas palabras de su historia para hablarle directamente a su abuelo: "Desde hace 6 años me enseñás y demostrás que dos almas que se aman, nunca, nunca se van a separar. Te amo tanto viejito, para siempre, tu estrellita".

El hilo de Twitter de Eve generó enorme repercusión: tuvo poco más de 9.000 retuits y de 3.000 comentarios, y superó los 146.000 "me gusta".

"Ay, esos abuelitos siempre haciendo de las suyas. No hay personas más maravillosas en la vida de uno", comentó una usuaria en la red social. "Qué hermoso, gracias por compartirlo. Los abuelos siempre están al lado nuestro, cuidando y protegiéndonos, aunque ya descansen en paz", aportó otra.

"Me hiciste emocionar, ¡esa conexión jamás se cortó! Los abuelos son lo más lindo que podemos tener, siempre, en cualquier plano, orgullosos y felices de sus nietos. Felicitaciones por el cierre de esta etapa que leemos que fue, realmente, de lo más feliz", señaló otra mujer.

En medio de tanta emoción, una joven escribió: "¡¡Ame!! ¿Pero soy la única que quiere saber que tenía el sobre?". Eve no dudó en contarle, entre risas: "100 dólares. Con mi mamá jodíamos con que menos mal que no eran pesos, porque si estaban guardados desde 2016 iban a ser, con suerte, $200".

Un día después de haber contado su historia y leído los comentarios, Eve siguió desbordando de emoción. "No puedo creer a la cantidad de gente que hice llorar", señaló la chica, y dejó un mensaje muy especial para sus eventuales lectores: "Les deseo que si tienen a alguien que ya no está físicamente, puedan abrirse y conectar porque siempre, siempre nos mandan señales. No hay que enojarse ni exigirlo, pasa cuando conectamos desde el amor. ¡Los abrazo!"