Tiernos y jugosos: los cuatro mejores cortes de carne para preparar un asado "de lujo"
Para preparar el mejor asado, hay que empezar por la selección. Por ello, te traemos los cuatro mejores cortes de carne, infalibles para deleitar a amigos y familia.
A la hora de elegir un buen menú para disfrutar entre amigos o familia, son muchos los platos que están catalogados como los favoritos de los argentinos. Pero sin dudas la carne y el asado son las estrellas de la mesa argenta, y se llevan todos los aplausos cuando realmente están hechos por una mano experta.
Pero no todo es la preparación. Quienes más saben de gastronomía, pero en especial de carnes, dicen que el mejor asado empieza en la elección del corte de carne.
Para esto, hace falta un ojo afilado y experto que emprenda el desafío de seleccionar lo que luego se echará a la parrilla y comenzará con su precioso proceso de cocción hasta terminar en el aguado paladar de los comensales.
A continuación, te traemos los mejores cuatro cortes de carne para quedar “como los dioses” con tus invitados, y prepararles un asado que no van a olvidar.
- Entraña fina: se trata de uno de los cortes favoritos de cualquier parrillero. Su textura y jugosidad lo hacen especial para tirarlo a la parrilla y que quede realmente tierno. Está cubierto por una fina capa de grasa, que le aporta el sabor justo, sin que caiga pesado. Una gran ventaja es que se cocina rápidamente, para los más ansiosos.
- Asado de tira: un clásico de la parrilla argentina. Es un corte de carne de aroma y sabor intenso, que se obtiene al cortar de manera transversal el costillar de la res. Lo ideal es cocinarlo a fuego medio.
- Colita de cuadril: una de sus principales ventajas es, no solo su extraordinario y suave sabor, sino que es un corte relativamente magro. Cocinado correctamente, queda súper tierno y liviano. En relación a la calidad, su precio suele ser bastante razonable.
- Tomahawk: se trata de uno de los cortes más consumidos actualmente. Es una chuleta de carne de grandes dimensiones que viene junto al hueso de la costilla. Tiene grandes cantidades de grasa intramuscular, lo que lo hace excepcionalmente tierno y jugoso.
Tomahawk asado: cómo cocinar a la parrilla esta exquisita pieza de moda
Para la condimentación, se puede optar por una simple pasada de sal y pimienta a gusto. Si se busca un sabor algo más intricado, podemos usar una brocha para pintar todo el tomahawk stake con aceite de maíz, antes de impregnar la carne con pimienta y sal gruesa a gusto.
Luego de limpiar nuestra parrilla, podemos comenzar a cocinarlo. Una de las varias opciones es la cocción directa a la parrilla, colocando el filete sobre los carbones por 15 o 20 minutos hasta alcanzar la cocción buscada. También se puede usar la cocción indirecta, colocando el tomahawk en el lado más frío de la parrilla y volteándolo cada cinco minutos hasta que se cocine. Para ambas alternativas, lo ideal es cocinarlo a término medio.
Si no estamos en ánimos de asado, el tomahawk también puede disfrutarse con el método sous vide, o cocción al vacío. Este método emplea bolsas de plástico herméticas que se sumergen en agua caliente por debajo del punto de ebullición, para lograr una pieza tierna de cocción uniforme.
Para cocinar el tomahawk, primero se debe cortar el hueso para trabajar con la carne. Luego, sellar la carne en una bolsa al vacío y colocarla en el baño de agua con la tapa hacia abajo, cocinando lentamente por un máximo de 3 horas. Una vez listo, aceitar una plancha y marcar ambos lados del filete hasta que queden dorados y crujientes.