Los sandwiches son una de las opciones más comunes para los almuerzos de verano debido a la frescura de sus productos y lo livianos que son, para poder combatir las altas temperaturas.

Otro de los puntos relevantes en este tipo de recetas es la rapidez con la que pueden prepararse y las posibles alternativas para combinar los sabores, yendo desde las instancias más clásicas a otras opciones más jugadas.    

Una de las opciones más típicas en el mundo es la combinación de jamón y queso, a la que se le pueden agregar otros ingredientes para que sea un poco más completo, como por ejemplo lechuga y tomate. 

Además, con este tipo de sandwiches dan la opción de prepararlos calientes, en forma de tostados, generalmente los que están preparados con pan de miga o pan lactal, entre las maneras disponibles. 

Los sandwiches más frescos 

El atún es una de las opciones más factibles para preparar sandwiches también, al combinarlo con mayonesa, un par de rodajas de pepino y tomate, aunque también quedan bien con huevo picado y aceitunas. 

Mientras que el pollo también es una de las opciones más elegidas para los almuerzos o las cenas por ser una opción relativamente barata, rica y fresca, y puede combinarse con algunas hojas de lechuga y salsa golf para que el sabor sea impactante. 

En tanto para los fanáticos del queso roquefort o queso azul, se puede preparar un sándwich con algunas rodajas de tomate, un chorrito de aceite de oliva saborizado con orégano, algunas hojas de albahaca y una rebanada de queso azul.

Opciones de licuados

Los licuados en época de calor son una de las opciones más elegidas para combatir el calor por la facilidad de prepararlos debido a que para la mayoría de los casos se necesita la fruta elegida para el licuado, azúcar, hielo y leche o agua.

Para preparar un licuado de naranja y durazno, por ejemplo, se requieren cuatro naranjas, una lata de duraznos, 500 ml de agua, hielo y azúcar o edulcorante. Estas proporciones son para que rindan cinco vasos, y en una licuadora se debe colocar la fruta pelada y cortada, el edulcorante o azucar, agua fría y licuar. Por último agregar hielo y liicuar nuevamente.