Para evitar hackeos, Zoom anunció nuevas medidas de privacidad
La plataforma de videollamadas lanzó una actualización con encriptación de extremo a extremo. Funciona en las versiones gratuitas y de pago, pero deberá ser activada por el anfitrión de la reunión. La prueba durará un mes y restringe el acceso a herramientas.
El servicio de videollamadas Zoom, que ya está disponible tanto para usuarios de pago como gratuitos y tanto en la versión para móviles como para ordenadores.
La compañía habia informado en junio que trabajaba en la actualización com mayor privacidad, y ahora, la plataforma anunció en un comunicado que la nuevas función se encuentra disponible desde el pasado lunes para las videollamadas, tanto de pago como las gratuitas, de hasta 200 participantes.
Las videollamadas encriptadas de extremo a extremo de Zoom emplean el sistema de encriptación de 256 bits AES-GCM, el mismo que en resto de reuniones de la plataforma, y permite que nadie salvo los participantes puedan conocer las claves de la llamada, ni siquiera los servidores de Zoom.
En las videollamadas normales, Zoom genera las claves de encriptación de cada reunión, pero con el nuevo sistema es el anfitrión de la llamada quien genera estos datos y los distribuye al resto de participantes de forma que los servidores de la compañía nunca obtienen la información necesaria para acceder a los contenidos.
Los administradores pueden activar las videollamadas encriptadas de extremo a extremo en sus cuentas, pudiendo habilitarlas por defecto para los grupos o seleccionarlas individualmente para cada reunión.
La característica se encuentra disponible desde el pasado lunes, y se encuentra habilitada por el momento solo a los usuarios que accedan a la versión 5.4.0 para Mac y PC, la aplicación de Android, las salas de Zoom Rooms y está en espera de aprobación de la App Store en el caso de la app para iOS.
La función se encuentra aún en fase de pruebas por los próximos 30 días, durante los cuales Zoom ha pedido a los usuarios que le proporcionen su opinión.
El motivo de esto es que, en aquellas reuniones en que esté activado, sus participantes perderán temporalmente el acceso a varias funciones como: la posibilidad de unirse a la reunión antes del anfitrión; la grabación automática en la nube; transmisión en streaming de la reunión; transcripción en directo; salas para grupos pequeños; chats 1:1; reacciones a la reunión y sondeos.
Está previsto que esta situación se vaya solucionando durante los próximos meses: la hoja de ruta de Zoom recoge cuatro fases (esta es la primera) durante los cuáles iremos recuperando gradualmente dichas opciones sin renunciar para ello al cifrado E2EE.
