Con la aparición de nuevos competidores en escena, Netflix, el gigante del streaming, está craneando entre sus máximos directivos diferentes estrategias para poder sacar a flote a la plataforma que supo ser la líder en su sector.

En ese sentido, es que en la “N roja” se está analizando la posibilidad de ofrecer un modelo de suscripción low cost a cambio de anuncios publicitarios en medio de las series o películas. Este plan podría hacerse efectivo “a lo largo del próximo año o dentro de dos”, según su cofundador, Reed Hastings.

Fue en medio de una intervención virtual de Hastings dirigida a sus inversores, que surgió esta propuesta de brindar a los usuarios la posibilidad de suscribirse a la plataforma a un menor precio, luego de anunciar que la compañía ha perdido 200 mil abonados durante el primer trimestre de 2022, periodo en el que obtuvo unos beneficios netos de 1,597 millones de dólares, inferiores a los 1,706 del año anterior.

“Aquellos que han seguido a Netflix saben que yo siempre he estado en contra de la complejidad de la publicidad y a favor de la sencillez de una suscripción”, señaló Hastings, quien se mostró optimista de cara a los nuevos proyectos de la plataforma.

Tras anunciar este martes su primera reducción en el número de clientes en una década, las acciones de la empresa cayeron un 28% en las operaciones electrónicas posteriores al cierre de los parqués neoyorquinos.

Por otro lado, Netflix ha sufrido en el último tiempo el embate del boom de otras plataformas, que se transformaron en sus competidoras directas y la destronaron en muchos países, como Disney y Apple, con quienes la empresa relacionó directamente su estancamiento.

Hulu y HBO, son otras de las plataformas que acudieron al mecanismo de la suscripción a bajo costo para atraer usuarios, a cambio de interrupciones publicitarias. “Soy fan de dar opciones a los consumidores, y permitir que los clientes que quieran una opción más baja y toleren los anuncios puedan conseguirla tiene mucho sentido. Es algo que abordaremos a lo largo del próximo año o dentro de dos”, confirmó Hastings.

Las repercusiones de la guerra Rusia-Ucrania en Netflix

El cofundador de la compañía se refirió también a las implicancias del conflicto bélico entre Rusia-Ucrania y la inestabilidad política desencadenada. Además, advirtieron que la suspensión de su servicio en Rusia tuvo como consecuencia la pérdida de 700,000 abonados de ese país.

Según indicó la compañía, sin ese hecho, el balance trimestral habría dado un resultado de 500,000 nuevos usuarios, igualmente a kilómetros de distancia de las previsiones de crecimiento que se había marcado para el arranque del año, con 2.5 millones de nuevos clientes.

Otras de las razones que atribuyó la firma a los escatimosos resultados son la inflación y la paralización de rodajes por el impacto del coronavirus.