Tras conocerse que la inflación de marzo fue de 6,7%, la tarifa del taxi fue aumentada un 30% en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). De acuerdo a las información que se conoció en las últimas horas, la misma regirá desde el 19 de abril y la bajada de bandera (10 fichas) pasará de $111 a $144

El flamante incremento en la tarifa de los taxis porteños lleva el valor de la ficha diurna de $ 11,10 a $ 14,40. Además, por cada 200 metros recorridos se suma una ficha, al igual que por cada minuto de espera.

Con respecto al equipaje de mano, transportar una valija o bulto menor de 0,90x0,40x0,30 metros, seguirá siendo gratis. Pero cada bulto adicional se va a cobrar $ 72 (equivale a cinco fichas).

Por su parte, la tarifa nocturna (de 22 a 06) el aumento es de 20% por encima de la diurna, por lo que la ficha pasará de $13,90 a $17,40 y la bajada de bandera será de $174 en lugar de los actuales $139.

La tarifa de los taxis en CABA acumuló un aumento del 86,5%. El último incremento se aplicó en diciembre pasado (30%). Durante 2020, las tarifas se mantuvieron congeladas debido a la pandemia.  

Cabe destacar que el último incremento se aplicó en diciembre pasado (30%).

Los propietarios de los vehículos alegan que el servicio de taxis se encuentra "en una de las peores situaciones que ha atravesado el gremio en los más de 100 años que lleva trabajando en la Ciudad de Buenos Aires", tal como indicó el conductor Jorge Patricio Celia en la audiencia.

Cada vez faltan más taxis

Según se planteó en la audiencia pública, no vinculante, en la ciudad de Buenos Aires el servicio de taxis no resulta un negocio rentable debido a los altos costos para mantener el vehículo, además de la renovación de la licencia. 

"De casi 38.000 ó 39.000 que eran los inscriptos con licencia, si hoy están trabajando entre 15.000 y 18.000 es mucho", recalcó Celia, vocero de los taxistas presentes

En la audiencia se planteó que los valores vigente hacen casi imposible renovar las unidades, comprar los repuestos y pagar los seguros. Y se denunció que la flota de taxis porteños en circulación también bajó drásticamente por culpa de aplicaciones de transporte privado como Uber y Cabify, que operan con menos regulaciones.

"Nunca antes había pasado que, habiendo trabajo, el taxi estuviera tan lejos de una rentabilidad acorde a la inversión y a la cantidad de horas que se trabaja", resumió otro de los conductores presentes, Gabriel Guerberoff. 

Ante este panorama, durante la audiencia se pidió mantener abierto el diálogo para discutir una nueva suba cada cuatro meses, es decir, en julio y noviembre.