El Blockchain se convirtió en la tecnología que todos miran, aunque muchos aún sin seguridad de por qué. Apalancado por el éxito de Bitcoin y las criptomonedas en general, cada día son más codiciados en el mercado laboral los programadores con perfil . criptográfico.

Según un relevamiento de la firma Data Corp, en 2022 el gasto total en blockchain alcanzará los 12.400 millones de dólares. Pero para sostener ese crecimiente se necesita mano de obra, al igual que cualquier sector de la economía.

Es así que -de acuerdo al imforme de empleabilidad de la empresa de educación tecnológica The Blockchain Academy- blockchain encabeza el top de la lista de las 10 habilidades duras más buscadas.

El desarrollador de blockchain multiplicó por 33 su presencia en los mercados y es el puesto más emergente; a la vez que la demanda por parte de las empresas aumentó entre 300 y 500 por ciento, según datos de 2020 de la misma firma. 

Las búsquedas de trabajadores freelance que desarrollen en algún lenguaje compatible con una estructura blockchain creció 6.000 por ciento, informó Blockchainjobs. 

Según Cryptocurrency Jobs, el salario de un programador en Solidity ronda los US$ 100.000 al año y puede alcanzar los US$ 200.000.

"Se pueden usar diversos lenguajes para programar contratos inteligentes en blockchain, sin embargo, el lenguaje más adoptado por la industria global es Solidity. En este lenguaje se desarrollan contratos para representar instrumentos transferibles como monedas y elementos únicos (NFTs), como así también contratos de compra y venta de los mismos", indicó Yemel Jardi, docente del programa Blockchain de la Escuela de Innovación del Instituto Tecnológico Buenos Aires (ITBA), en diálogo con Infotechnology.

Actualmente, en Argentina es difícil conseguir programadores de blockchain debido a que es una tecnología nueva y muy novedosa conceptualmente.

"Recién ahora están apareciendo dentro de la academia, desde las ciencias de la computación. Pero sigue siendo muy comunitario y autodidacta", resumió Gabriela Genovese, encargada de Investigación e Innovación en IOVLabs e impulsora de ecosistemas DeFi en la Argentina. 

¿Qué es el blockchain?

Se trata de una de las palabras de moda en los últimos tiempos. La cadena de bloques es también un concepto que plantea una enorme revolución no solo en nuestra economía, sino en todo tipo de ámbitos.

El concepto de cadena de bloque fue aplicado por primera vez en 2009 como parte de Bitcoin, cuando Satochi Nakamoto, el creador de la criptomoneda, estableció las bases de na red descentralizada, la arquitectura y los algoritmos a resolver para generar una moneda digital.

Es una estructura de datos cuya información se agrupa en conjuntos (bloques) a los que se les añade metainformaciones relativas a otro bloque de la cadena anterior en una línea temporal.

El creador de Bitcoin es conocido bajo el seudónimo de Satoshi Nakatomo (Gentileza: AP).

De esta forma, gracias a técnicas criptográficas, la información contenida en un bloque solo puede ser editada modificando todos los bloques posteriores. Esta propiedad permite su aplicación en un entorno distribuido de manera que la estructura de datos blockchain puede ejercer de base de datos pública no relacional que contenga un histórico irrefutable de información

La tecnología blockchain es especialmente adecuada para escenarios en los que se requiera almacenar de forma creciente datos ordenados en el tiempo, sin posibilidad de modificación ni revisión y cuya confianza pretenda ser distribuida en lugar de residir en una entidad certificadora.

Además puede ser ustilizada en diferentes ambitos: almacenamiento de datos; transmisión de datos, confirmación de datos.

Tal es el furor que existe, que los interesados ya no provienen solamente del mundo de la informática. Por ejemplo, Alejandro “Papu” Gómez, el futbolista de la Selección Argentina y el Sevilla, es uno de los principales inversores de Shirtum, una aplicación de coleccionismo digital basada en tecnología Blockchain.

La empresa es una plataforma virtual que desarrolla NFT (Non-Fungible Token, las siglas en inglés). En español: un activo digital único, no replicable e inmutable. Y está a cargo de la colección de NFTs de San Lorenzo.

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