Gran Hermano se acerca a su fin y Marcos es uno de los participantes con más chances de ser el ganador de esta edición. “El primo”, como lo apodaron dentro y fuera de la casa, sus compañeros y los seguidores del show, se ganó el cariño de la gente desde el minuto cero y con su buena actitud logró llegar hasta acá.

Hay una característica muy particular de Marcos y es que siempre fue callado e introvertido desde que entró a Gran Hermano 2022, pero ahora parece haberse metido aún más adentro.

Hace unos días, cuando su hermana Valentina ingresó a la casa más famosa del país, el joven se mostró contento con la llegada de su familiar, pero al poco tiempo ya volvió a estar cabizbajo y con poca energía.

En las últimas horas, la joven se mostró bastante preocupada por la salud de su hermano, ya que desmejoró físicamente y emocionalmente. Por eso decidió hablar del tema y darle algunos consejos.

A raíz de esto, la salteña charló con Marcos haciéndole saber su preocupación. Pese a los esfuerzos que Valentina está llevando a cabo con el fin de levantar el ánimo del participante, no logra conseguirlo y le comentó: “Cuando viniste fue como que me agarró mucha felicidad, pero a la vez también muchas ganas de ver a mamá y a papá”.

Por este motivo, la joven aprovechó la conversación para hacer hincapié en otros temas que le preocupaban sobre el estilo de vida de su hermano, como la alimentación, la falta de sueño y la constante preocupación por su familia. “Tratá de dormir más y si te sentís así, no hagas ayuno... Lo de no dormir puede ser por muchos pensamientos”, consideró Valentina, mientras le hablaba con mucha dulzura.

La llegada de los familiares

La entrada de los parientes despertó en los jugadores sentimientos para bien y para mal. La realidad es que la mayoría se mostró feliz y agradecido por poder reencontrarse al menos con uno de sus familiares. Y de tener alguna noticia del mundo exterior, después de haber estado cuatro meses adentro de la casa más famosa del país.

Pero no todos tienen la misma personalidad ni se toman las situaciones que les tocan atravesar de la misma manera. En este caso, Romina tampoco fue del grupo de los hermanitos contentos con el ingreso de su familiar. El que visitó a Romina fue su sobrino Fabián, pero ella esperaba ver a sus hijas.

La exdiputada hizo público su disgusto, aunque aclaró que no se trataba de su sobrino en particular, sino que tenía una gran desilusión porque esperaba tener noticias de sus nenas.

Nacho, por su parte, recibió a su papá, Rodolfo, y esta fue una de las mejores cosas que le pudo haber ocurrido. Entre risas y lágrimas, el señor, que vivió gran parte de su vida en España, se hizo querible y popular dentro de los propios integrantes de la casa, y también para la gente de afuera. 

Lucila también está feliz con tener cerca a su mamá Gladys. Si bien ella se había reencontrado con su madre fuera del certamen, necesitaba volver a cargar energías para pasar el trayecto final del juego.

Dentro de los eliminados por el público y por el voto de los hermanitos se encontraron Fabián y Florencia, la hermana de Camila.

Después, Julieta y Marcos están agradecidos con el ingreso de sus hermanas. En el caso de la modelo de Villa Devoto, recibir a su hermana mayor en principio no fue lo que esperaba, ya que estaba ilusionada con que entre su novio, Lucca.de su completo agrado porque también esperaba a su novio Lucca. Sin embargo, una vez disipadas algunas dudas que ella tenía, se distendió y empezó a disfrutar del tiempo junto a Camila.