Ganó 6 “palos” en “Los 8 escalones”, pero en vez de festejar le hizo un extraña observación a Guido Kaczka
Diego logró consagrarse como bicampeón del famoso programa de televisión y no dudó en aprovechar su tiempo para realizar un inesperado reclamo ante las cámaras.
Ya es de común conocimiento que no es nada fácil poder salir victorioso de “Los 8 escalones”. Para poder concretar este objetivo, hay que responder de manera correcta la mayor cantidad de preguntas, pero, además, hay que rogar para que la suerte esté de tu lado.
A aquellos que logran obtener el premio mayor, se les presenta la oportunidad de elegir si quieren regresar al día siguiente para intentar duplicar el premio obtenido, o quedarse con lo ganado. Algunos pocos fueron los que lograron duplicar su premio. Esta semana fue uno de esos casos.
Diego, que trabaja en el área de sistemas de un banco, se convirtió en el dueño de un total de 6 millones de pesos tras ganar dos días seguidos el programa Sin embargo, durante el festejo, incluyó un inesperado reclamo al conductor, Guido Kaczka.
La primera participación de Diego había sido el jueves 24 de agosto, donde compitió en la final contra Martín, el joven que tiene una fascinación por las hormigas. El hombre se impuso sin problemas y se llevó a casa el premio mayor.
El conductor, mientras tanto, se mostró desesperado por conocer qué iban a decir sus compañeros del banco. Pero, para su sorpresa y la de muchos espectadores, el ganador le confesó algo inédito. “No saben nada. Tenía miedo de pasar papelones, así que no les dije”, reveló. Si bien aceptó regresar al día siguiente, comentó que seguía nervioso, aun después de haber triunfado.
El viernes 25, el campeón volvió al programa para defender su título. En esta ocasión, Guido realizó un comentario sobre su trabajo. “El hombre que está en el banco y solo ve pesos y dólares, debe haber un montón ahí en el banco, todo el día se ve el dinero ir y venir”, dijo el conductor. A pesar de las bromas, Diego le aclaró que él estaba en el área de Sistemas, por lo que su realidad no era la que imaginaba.
“Pero, ¿llegás al trabajo y están esos camiones que parece que hay un montón de plata cuando uno los ve, pero por ahí no hay nada adentro?”, agregó Kaczka con duda.
Diego tuvo un destacado recorrido y llegó una vez más a la final. A pesar de la experiencia, los nervios fueron difíciles de controlar. “No puedo con mi transpiración de manos. Toda la vida las transpiré, pero hacía mucho que no lo hacía. Si estoy tranquilo no pasa nada, pero si no, me transpiran un montón. En entrevistas laborales chorreo”, le señaló a Carmen Barbieri antes de arrancar la final.
En el último escalón, ambos finalistas se encontraron con un complicado nivel en el que aparecieron más errores que aciertos. Sin embargo, Diego logró sacar una leve ventaja de cara a la pregunta decisiva a cargo del invitado del día, Andy Freire: “¿Cuál de estos términos refiere a un descubrimiento alcanzado de manera casual o accidental? Borborigmo, resiliencia, albaricoque o serendipia”. Los dos respondieron mal, pero de igual manera, el campeón ganó los 6 millones de pesos.
“¡No lo puedo creer!”, se emocionó Diego con el cheque en mano, aunque frenó el festejo de repente para realizar una autocrítica y mencionó los “muchos errores” que cometió. “Ayer no había sido así. Hoy fue un muy buen recorrido en los escalones”, advirtió el conductor, no obstante fue sorprendido con una inesperada observación. “Estuvieron difíciles”, le comentó Diego.
“¿Es una queja?”, le replicó Kaczka. “Y... un poquito”, destacó el campeón. Si bien el conductor no hizo caso omiso al comentario, destacó que se lo dejaba pasar: “Un reclamo... está bien, no te digo nada porque en el banco debes recibir una barbaridad”. Acto seguido, el campeón aceptó la invitación de regresar el lunes a competir por los 9 millones de pesos.