Fue una de las actrices más lindas, sufrió fuerte depresión por grandes perdidas familiares y luego dio un rotundo cambio: ¿Qué es de la vida de Cristina del Valle?
Considerada como una de las mejores intérpretes de la televisión argentina, tras grandes éxitos decidió abandonar todo por su familia. Todos los detalles de su historia, en la nota.
Cristina del Valle fue una de las actrices más reconocidas, populares y queridas de las décadas del 70 y 80. Trabajó junto a grandes galanes y realizó muchos éxitos en la industria artística nacional. Su carrera iba con viento a favor, sin embargo, paso momentos muy difíciles que desencadenaron grandes tristezas que le cambiaron la vida para siempre. Actualmente, se encuentra muy lejos de los medios de comunicación y se dedica a su familia full time.
Nacida en 1942 en una familia clase media de Buenos Aires. Sus padres siempre la apoyo a seguir sus sueños y fue lo que hizo. Desde muy chica supo que su pasión estaba en el arte, por eso estudió actuación con grandes figuras como con la actriz, Lydia Lamaison. Como muchas intérpretes del país, le costó mucho llegar a las "grandes ligas" del espectáculo. Sus primeros papeles tuvieron lugar para 1966 en la película "Escala musical" y en la novela "A orillas del gran silencio". En ese mismo tiempo, incursionó en la conducción en el programa "Escalera musical" en reemplazo de Cristina Berys. Un año después, llegó al teatro de la mano de la obra "Los días felices de Puget" donde trabajo junto a Fernanda Mistral y Guillermo Bredeston.
La popularidad de la actriz comenzó a elevarse en la década del 70 cuando participo del drama televisivo "Nino, las cosas simples de la vida". Si bien su papel de "Norma" no era de los principales, le dio un gran lugar para comenzar profesionalmente con la carrera. Finalmente, el estrellato se hizo realidad con "Amar al ladrón". Esta telenovela fue muy importante para Del Valle en todo sentido. En primer lugar, fue su primer protagónico; en segundo plano (pero más relevante) conoció a uno de sus amores más grandes. Se emitió entre 1973 y 1974 y narraba una historia de amor que tuvo un final trágico.
Si bien la intérprete tenía un especial talento para la comedia, la realidad es que participo en todo tipo de proyecto ya sea de cine, teatro o de la TV. Hizo varios personajes recordados hoy en día como la dulce "Alejandra" en la comedia infantil, "Diablito de barrio" junto a Juan Carlos Calabró, Lorena Paola y Marcos Zucker. Otra gran interpretación fue en "Matrimonios y algo más". En 1967 tuvo un éxito rotundo en la temporada de la ciudad de Mar del Plata con "Los días felices" con Guillermo Bredeston y Fernanda Mistral, aquí también tuvo una memorable interpretación.
En cuanto a su vida personal, tuvo tres grandes parejas en su historia. Su primera relación conocida fue con Alberto Coutoune. Con él estuvo casada 7 años y tuvo a su primer hijo, Patricio, en 1970. Luego de la separación, ella quería estar soltera, pero el amor le volvió a tocar la puerta. En medio de las grabaciones de "Amar al ladrón", Claudio Levrino, actor que compartía el protagónico con ella, la conquisto. Este noviazgo, rápidamente se transformó en uno de los más comentados y amados por la audiencia. A pesar de que la unión parecía para siempre, una mala jugada del destino, termino con ellos.
La madruga del 18 de enero de 1980, quien entonces era su marido, Levrino, murió de un tiro que él mismo se disparó por accidente con su propia arma. Por lo que contó Cristina del Valle a los investigadores que trataron el fatal accidente, estaban discutiendo por la tenencia del revolver, ya que ella no estaba de acuerdo con tenerla. El actor para mostrar que no era para preocuparse, se puso el elemento en la sien y gatilló, creyendo que estaba descargada, pero no era así. La mujer llamó a la emergencia e intento reanimar a su pareja, aunque fue demasiado tarde.
Para el momento que falleció su marido, Federico, el hijo de ambos tenía a penas dos años, por eso la muerte fue un gran dolor que le afecto durante muchos años. En ese entonces su tristeza fue tan grande que debió recibir mucho apoyo emocional de sus colegas, amigas: Nora Cárpena, Zulma Faiad, Marta González, Marta Bianchi, Elizabeth Killian y Tita Russ y la gran familia ensamblada que habían creado con el intérprete.
Después de semejante dolor y tras una operación de endometriosis, le detectaron cáncer de útero que por suerte logro superar. Años después, decidió darle una nueva oportunidad al amor. En 1983 comenzó un fuerte noviazgo con el reconocido actor Ruben Green. Estuvieron juntos y en convivencia durante 20 años, pero en 2003 el hombre murió de cáncer. Esta nueva perdida, la obligo a tomar nuevas medidas para mejorar su salud física y mental. A raíz de estas cuestiones, debió comenzar un tratamiento psiquiátrico. Gracias a la ayuda del profesional y a que se aferró a sus hijos, pudo salir adelante.
Asimismo, cabe destacar que la familia paso un delicado momento con la salud de Federico, el hijo menor de la actriz. Cuando tenía 10 años tuvo un accidente con pirotecnia, que le mutiló parte de su mano derecha. En ese momento, también recibió mucha ayuda del ambiente artístico, de hecho, Susana Giménez se ofreció a pagarle un implante que costaba 500 mil euros. Recientemente, uno de sus nietos también fue foco de atención de la actriz y sus familiares. El joven fue parte de un violento choque que tuvo, que le causo varias lesiones.
Después del fallecimiento de su último esposo, poco a poco fue abandonando la actuación. En una entrevista hace algunos años sostuvo "No extraño nada del ambiente artístico, porque siempre mi familia estuvo ante todo. Aunque debo decir que el trabajo me permitió darle una buena vida y educación a mis hijos". Además, detallo que le gusta el ocio, disfruta de estar en su casa tranquila. Sus actividades van de escuchar música, mirar la televisión, estar con su familia y cuidar a sus nietos.