Escapada: un pueblito "olvidado" donde la tranquilidad enaltese a los visitantes y la comida los conquista
Bien cerquita de CABA, existe un destino donde la naturaleza se apoderó de la antigua arquitectura para regalar postales soñadas y una experiencia rural completamente única e inigualable para escapar de la rutina.
Después de dos semanas de vacaciones de invierno, todos los argentinos volvieron a las respectivas obligaciones del colegio, facultad y trabajo. Sin embargo, cada fin de semana se convierte en una buena alternativa para salir de la rutina e iniciar una escapada de pocos días u horas por algunos de los pueblitos históricos de la provincia de Buenos Aires.
Estos bonitos destinos, localizados a lo largo y ancho del territorio bonaerense, pero sobre todo en la cercanía a de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, cuentan tanto con impactantes paisajes que lo hacen un lugar ideal para relajarse y disfrutar de la naturaleza como interesantes opciones de actividades culturales e incluso variedad de opciones gastronómicas.
Si estás buscando un sitio que cumpla con todas estas características, te compartimos una pequeña localidad “olvidada” que se encuentra a tan solo 150 kilómetros de Capital Federal y se convirtió en uno de los sitios más adecuados para encontrar tranquilidad en familia, amigos o pareja.
Un destino cerca de CABA para encontrar la tranquilidad:
Castilla es una pequeña localidad de 700 habitantes que se sitúa en el partido de Chacabuco, noreste del territorio bonaerense. En sí, se encuentra a tan solo 150 kilómetros de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y se convirtió en uno de los sitios más adecuados para realizar una escapada de fin de semana en cualquier momento del año.
Aquellas personas que deseen llegar hasta este acogedor pueblo podrán hacerlo en perfectamente en vehículo. De hecho, el acceso a esta localidad tendrán una duración de aproximadamente 2 horas y 20 minutos mediante la Ruta Nacional 7 hasta Carmen de Areco, punto donde se empalma con la Ruta Provincial 51 hasta la Ruta Provincial 43.
Actualmente, este destino cuenta con hospedaje, esparcimiento verde para toda la familia y gastronomía de primera calidad. Asimismo, se posiciona como un lugar elegido por la tranquilidad para las familias, ciclo viajeros y motociclistas que emprendan aventuras inolvidables en los diversos rincones de la provincia de Buenos Aires.
Un lugar para disfrutar de la naturaleza y la historia:
El pueblo posee dos plazas que sirven como nodos de su diseño urbano, la Plaza San Martin y la Plaza Belgrano, las cuales están rodeadas por los edificios administrativos más importantes como la Escuela D. F. Sarmiento, el cuartel de Bomberos Voluntarios, la comisaría, la delegación municipal, la parroquia de Nuestra Señora de Lourdes y el hospital Municipal Tomás Keating.
Uno de los lugares que más visitan al recorrer este pequeño pueblo bonaerense es la vieja estación de tren, donde conservan las vías del recorrido que dejó de funcionar y desconectó a la localidad de las grandes ciudades. Asimismo, se puede pasar el día en alguna de las estancias turísticas, las cuales ofrecen la posibilidad de realizar actividades campestres como pasear a caballo.
Una de las particularidades de este pueblo es que es reconocido como el sitio que posee el premio por “La mejor milanesa de Buenos Aires”, según la revista El Federal. Con el objetivo de mejorar la oferta gastronómica, en la actualidad, se pueden encontrar dos bodegones bien de campo donde las comidas tipo italianas, picadas y asados son el boom para todos los viajes.