Escapada: la localidad que esconde una de las mejores lagunas de la región y tiene increíbles actividades para toda la familia
¿Querés visitar un lugar lindo que valga la pena? Entonces, no te podés perder este excelente viaje que reúne un montón de sorpresas. Leé todos los detalles del sitio, en la nota.
Puán es una pequeña localidad ubicada al sudoeste de la provincia y pertenece a los pueblos de Buenos Aires que hay que conocer por su valor histórico y cultural. Además, se destaca no solo por sus encantadores paisajes, sino que también ofrece una gran variada de alternativas turísticas para pasar unos días de tranquilidad y diversión en contacto con la naturaleza.
Este lugar, que parece salido de una película, es cabecera del partido homónimo que lleva el mismo nombre y se encuentra a 577 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires y a unos 160 de Bahía Blanca. Llegar hasta allí lleva más o menos 7 horas en vehículo, pero pese al largo viaje, es una escapada de fin de semana largo ideal para hacer en familia. Desde Capital Federal se sale por la Riccheri hasta la Autopista Ezeiza-Cañuelas. Conducir por este camino y empalmar con la Ruta Nacional 205. A la altura de Bolívar, tomar la Ruta Provincial 65 hasta el kilómetro 89 y desde allí unir con la Ruta Nacional 33 hasta Pigue. Finalmente, dirigirse por la Ruta Provincial 67 que lleva a la entrada.
Un pueblo con larga historia
A comparación de otros lugares de la provincia, no surgió de la llegada del servicio ferroviario a la zona, sino que fue a partir de la conquista del desierto. Se toma como fecha de fundación el 5 de junio de 1876. Ese día el coronel Salvador Maldonado estableció su comandancia en la actual plaza principal. Desde allí en adelante, se fueron instalando distintas edificaciones públicas y poco a poco se fue poblando la zona sobre todo con los familiares de los militares que se instalaron en el cuartel.
A lo largo de su vida, han surgido varios orígenes al respecto del nombre de Puán. Lo cierto es que existen más de 20 versiones sobre su significado, pero la que más apoyan sus vecinos es la que dice que los pueblos originarios de la región le pusieron en relación con el reflejo del sol que se puede ver durante todo el día sobre la inmensa laguna, es decir, “Epu-Antú” que en lengua mapuche significa “Dos Soles”.
Una localidad con atractivos para todos
Su principal punto turístico es la laguna que ocupa unas 700 hectáreas, tiene un balneario municipal y además, largos caminos para pasear a la vera de él. Este sitio se caracteriza por su tranquilidad ambiental y el pequeño oleaje permite la práctica de diferentes deportes acuáticos como windsurf, vela, esquí, kayak. También hay un gran desarrollo de pesca deportiva donde se destaca sobre todo el pique de pejerrey. El recinto cuenta con una frondosa arboleda, sector de parrillas, instalaciones para camping y una confitería.
En medio del espejo de agua se ubica la Isla de Puán, la cual dicen que es mágica y allí hay más de cien especies de flora autóctona y una pequeña casa que pertenecía a Rómulo Franco, primera autoridad del partido en el año 1886. Debido a su valor, este paraje fue declarado reserva natural y cultural. Dentro del lugar se ofrecen visitas guiadas y tiene un hermoso mirador donde se pueden disfrutar de las vistas más icónicas de la localidad. Una de las actividades más recomendadas es la caminata por senderos demarcados que incluyen interpretación de la flora y fauna dominante.
Más allá de la laguna, Puán se encuentra rodeada de cerros y de allí deriva más actividades turísticas. Por un lado, en los miradores del Cerro Grande o de la Paz, se puede admirar los bellos paisajes que presenta el pueblo. En esa zona también se ubica Millenium, un imponente mirador que fue construido en conmemoración de los 2.000 años del nacimiento de Cristo. Su particular forma está inspirada en los pozos romanos donde estuvo detenido Jesús y sus apóstoles. Es importante destacar que posee dos rampas de acceso helicoidales para que nadie se pueda perder del paseo.
Esta localidad también se desarrolla el turismo religioso, ya que posee lugares de peregrinación como una gruta a la Virgen de Lourdes, que no solo tiene la imagen de la santa, sino que también tiene una pequeña su cascada. Por otro lado, se puede disfrutar del paseo ecológico botánico San Francisco de Asis que conmemora su trabajo solidario.