Cada vez falta menos para el último fin de semana largo del año y es el momento ideal para visitar Chapalcó, una pequeña villa turística que se encuentra sobre el margen de la laguna Chasicó y dentro del partido de Villarino. Pese de que es una un sitio "poco conocido", es un lugar único dentro de la provincia porque está situada a 21 metros por debajo del nivel del mar. Esta característica la convierte en la única localidad de Argentina que se posiciona en esta geografía. Más allá de esta cuestión natural, también reúne una rica historia y un sinfín de actividades que se adoptan a todas las edades. 

Este peculiar balneario es sumamente tranquilo y solitario, por eso se suele elegir como lugar de descanso. Es importante destacar que si bien no está cerca de la Ciudad de Buenos Aires, ya que se ubica a 750 kilómetros, es una excelente escapada para realizar en cualquier momento del año. Para llegar hasta allí se bebe tomar la Riccheri, luego empalmar con la Autopista Ezeiza-Cañuelas y salir por la Ruta Nacional 3. A la altura de Villarino, doblar por la Ruta Nacional 22 que conduce hasta el camino que permite el ingreso al paraje. 

Un repaso por la historia de la localidad 

Este pueblo nace a partir de un establecimiento agropecuario que fue instalado a principios del siglo XX y que pertenia a José María Cousté y Alfredo López Cousté. Si bien el objetivo de la zona era la producción industrial, cuando descubrieron las propiedades de la laguna, iniciaron un proyecto de turismo terapéutico. Los primeros visitantes fueron miembros de familias ricas de la capital que buscaban descansar y gracias a esas presencias, se comenzaron los planos de urbanización. 

Como el caso de las termas de Caruhé, en la década del 1970, como consecuencia de un sostenido aumento de las precipitaciones, se inundaron las calles y la laguna gano terreno sobre la localidad. La villa desapareció por completo durante las dos décadas, pero gracias al trabajo de los vecinos se pudo reconstruir la zona y se reinició el circuito turístico. El término Chapalcó deriva de la lengua mapuche, significa "agua barrosa" y refiere a las características geográficas del área.

Actualmente, hay zonas que continúan inundadas. 

 Un paraíso para disfrutar en familia 

Chapalcó fue declarado Reserva Natural de la Provincial de Buenos Aires, ya que a lo largo de la región se pueden encontrar más de 140 especies de aves, mamíferos y vegetales, que en muchos casos están en peligro de extinción. A raíz de esta cuestión, la larga costa de arenas claras es prácticamente virgen y son extremadamente cuidadas. Las aguas de la laguna son calidad, muy tranquilas y aún poseen un grado de salinidad que son ideales para aquellos visitantes que tienen problemas de salud. 

Más allá de disfrutar de las playas, muchas personas llegan para practicar pesca deportiva, ya que existe buen pique en la zona y se puede realizar la actividad en pequeñas embarcaciones que se alquilan en el lugar. Continuando con el turismo aventura, uno de los circuitos que más gusta es el paseo en kayak por las áreas inundadas en donde se puede apreciar como parte de la localidad permanece detenida en el tiempo. Asimismo, la región se desarrollan otros deportes acuáticos que son aptos para todas las edades. 

Las playas de Chapalcó son paradisiacas.

Por la tranquilidad del lugar y de la laguna, es ideal para disfrutar en familia. Es importante mencionar que cuenta con diversidad de hospedajes que van de cabañas campestres, casas para alquilar con vistas a la naturaleza local y un camping municipal donde se puede hacer campamento con fogones nocturnos. Asimismo, reúne una variada oferta gastronómica donde se destacan sobre todos los platos tradicionales.