No es un secreto que la llega del coronavirus ha aumentado súbitamente la cantidad de casos de ansiedad en todo el mundo. Esto ha repercutido también en una baja calidad del sueño y en problemas para dormir.

Es necesario aclarar que cada caso es diferente y que si se trata de una alteración grave hay que consultar inmediatamente con un profesional. Sin embargo, también hay algunas prácticas alternativas de las que echar mano para ayudarnos a relajarnos, controlar la ansiedad y por lo tanto dormir mejor.

En las últimas semanas se ha viralizado en las redes sociales la técnica 4-7-8, también conocida como "respiración relajante". Se trata de un procedimiento popularizado por el doctor estadounidense Andrew Weil, fundador y director del Centro de Medicina Integrativa de la Universidad de Arizona.

¿Qué es la respiración 4-7-8?

Según explica el propio médico en su portal web, esta técnica permite bajar la ansiedad y se puede usar no solo para conseguir un mejor descanso sino también para afrontar situaciones difíciles.  “Una vez que desarrolles esta técnica de respiración practicándola todos los días, dos veces al día, será una herramienta muy útil que siempre tendrás contigo. Úselo siempre que suceda algo perturbador, antes de reaccionar”, detalla Weil.

Si bien no hay investigaciones médicas que lo respalden, el doctor asegura que algunas personas logran dormirse en tan solo un minuto. “Úselo siempre que se dé cuenta de la tensión interna. Úselo para ayudarlo a conciliar el sueño. Úselo para lidiar con los antojos de comida. Excelente para la ansiedad leve a moderada, este ejercicio no se puede recomendar demasiado. Todos pueden beneficiarse de ella”.

Cómo practicar la técnica de respiración 4-7-8

El doctor recomienda realizarla dos veces al día, repitiendo el ciclo cuatro veces durante el primer mes y hasta ocho los más experimentados. Por otra parte aclara que algunas personas pueden sentirse mareadas luego de realizarla, sobre todo las primeras veces, por ello es necesario que se realice de forma cómoda, ya sea sentado o acostado.

Coloque la punta de la lengua justo detrás de los dientes frontales superiores y manténgala allí durante todo el ejercicio. Siempre se inhala silenciosamente por la nariz y se exhala de forma audible por la boca.

  1. Exhala por completo por la boca, haciendo un silbido.
  2. Cierre la boca e inhale silenciosamente por la nariz contando mentalmente hasta  cuatro.
  3. Aguante la respiración mientras cuenta hasta siete.
  4. Exhala completamente por la boca, haciendo un silbido mientras cuentas hasta ocho.

Este es un respiro. Ahora inhale de nuevo y repita el ciclo tres veces más para un total de cuatro respiraciones.

Hacé la respiración guiada con este video de Medita Podcast