La higiene, clave en la lucha contra el Covid-19
En plena llegada de la segunda ola de coronavirus hay que incrementar las medidas de limpieza y prevención contra la enfermedad.
La llegada de la segunda ola de coronavirus ya transita entre nosotros, y evitar que crezca y complique la situación epidemiológica en la Argentina depende de nuestra responsabilidad, tanto con el apropiado uso del barbijo como por la práctica de una correcta limpieza e higiene personal dentro y fuera de los hogares.
Si bien la fase de investigación que se lleva adelante respecto al Covid-19 sigue adelante, respecto de su procedencia real, las nuevas cepas que aparecieron en el mundo o las vacunas que están en espera para ser probadas, sí es de público conocimiento que esta enfermedad se transmite cuando las gotas respiratorias de una persona infectada (cuando tose, estornuda, habla o canta) ingresan a la boca, nariz o los ojos de las personas que están cerca.
También sabemos ahora que las personas pueden infectarse y transmitir el virus incluso sin tener ningún síntoma. Además, las personas pueden infectarse al tocarse la boca, nariz o los ojos después de tocar superficies contaminadas con el virus. Este puede sobrevivir en las superficies entre unas pocas horas y varios días, pero la buena noticia es que un elemento de limpieza sencillo puede matarlo.
Aquí es donde el factor higiene y limpieza son unos de los eslabones de una cadena que apunta a la prevención del coronavirus, al menos hasta que toda la población de la tierra esté vacunada o la enfermedad se haya erradicado, situaciones que por el momento no están al alcance de la mano.
Higiene personal
En cuanto a la higiene personal, los organismos sanitarios del mundo han dejado una serie de recomendaciones a tener en cuenta, por ejemplo, no hay que tocarse la cara, ojos, nariz y boca, como primer consejo.
Además, cuando se tosa o estornude, hay que cubrirse con la boca y la nariz con la parte interna del codo o con un pañuelo de papel, y apenas concluido esto, hay que desechar el pañuelo de papel inmediatamente.
Otro punto a saber es que hay que mantener una distancia de al menos 1 metro entre una personas y otra cuando está fuera de tu hogar. En los lugares públicos hay que usar barbijo, tapaboca o mascarilla, y más si son ciudades, donde el coronavirus tiene una fuerte cantidad de contagiados.
Un punto a tener en cuenta es mantenerse alerta a cualquier síntoma de Covid-19 que puedan presentar usted o su familia. En caso de presentar algún tipo de síntoma (fiebre, debilidad, tos, pérdida del olfato o gusto, etc.), se recomienda buscar atención médica temprano y quedarse en su casa, excepto para recibir atención médica.
Lavado de manos
Lavarse las manos de manera frecuente con jabón y agua, al menos durante 20 a 30 segundos, es otra de las medidas que se deben aplicar para tener una correcta higiene y prevención de enfermedades.
Hay que asegurarse de lavarse las manos siempre después de sonarse la nariz, toser o estornudar en un pañuelo de papel, antes y después de usar el barbijo, después de ir al baño, cuando salga de su casa y al regresar, antes de preparar los alimentos y de comer, antes de maquillarse, antes de manipular los lentes de contacto, etcétera.
En tanto, si va a utilizar desinfectante para manos, asegurarse de que contenga al menos un 60% de alcohol, debe cubrirse las manos completamente con el producto y frotárselas una con otra durante 20 a 30 segundos, hasta que las sienta secas. Siempre que sus manos estén visiblemente sucias, debe lavárselas con jabón y agua y no importa la temperatura de esta, ya que sea tibia o fría, el agua es igual de efectiva para remover los gérmenes y los virus de las manos.
Limpieza en casa
Con relación a la higiene en una vivienda, hay que desinfectar superficies que se tocan con frecuencia, como por ejemplo manijas de las puertas, mesas, sillas, pasamanos, superficies de la cocina y baños, grifos, inodoros, interruptores de luz, teléfonos móviles, computadoras, tablets, teclados, controles remotos, controladores de juegos y juguetes favoritos de los niños.
Si una superficie está sucia, hay que limpiarla con jabón o con detergente y agua. A continuación se debe usar un producto desinfectante que contenga alcohol (cerca de un 70%) y no es recomendable usar vinagre u otros productos naturales.
Si no se encuentran aerosoles o toallas desinfectantes, en este caso se debe limpiar con jabón y agua. En algunas superficies se puede usar una solución de alcohol diluida de uso doméstico.
¿Y la ropa?
Otro interrogante tiene que ver con nuestra ropa, ya que no se sabe cuánto tiempo sobrevive el virus de Covid-19 en las telas, pero muchas prendas de vestir tienen elementos de plástico o metal en los que podría vivir unas pocas horas o inclusive varios días.
Es necesario ser precavido y tener sentido común, y entre las prácticas recomendadas están retirarse los zapatos al entrar en la casa, cambiarse de ropa por prendas limpias al regresar a casa después de estar en lugares concurridos, y lavarse las manos con jabón y agua inmediatamente después.
Respecto al lavado de la ropa, se debe lavar sábanas, toallas y ropa con regularidad. Un consejo para minimizar la posibilidad de que el virus se disperse por el aire es no sacudir la ropa sucia.
Cuando se lave la ropa, hacerlo con jabón o detergente y con agua lo más caliente posible y secarla completamente, ya que tanto el lavado como el secado ayudan a matar el virus. Además, hay que lavarse de inmediato las manos con jabón y agua, o usar un desinfectante para las manos a base de alcohol.
Finalmente, se debe lavar o desinfectar la bolsa o el cesto de la ropa sucia, ya que se considera la posibilidad de guardar la ropa sucia en bolsas desechables, algo que no es muy recomendable. Hay que recordar que la pandemia de coronavirus todavía sigue haciendo estragos en todas partes y nuestro país no es la excepción, por eso, sólo queda seguir cumpliendo con las recomendaciones de los profesionales de la salud para prevenir la llegada de este virus a nuestras casas.
Coronavirus y los alimentos
Además de la higiene personal, del hogar o de lo que manipulamos a diario, hay otro factor clave para tener en cuenta y evitar la propagación del virus: el manejo de los alimentos en casa o fuera de ella. El riesgo proviene de estar en estrecho contacto con otras personas mientras se compran alimentos o cuando se atiende a los servicios de delivery de comidas.
Así, es importante mantener una distancia de al menos un metro de los demás, usar un tapaboca en lugares públicos y lavarse las manos con frecuencia.
En tanto, existe una serie de precauciones que hay que tomar, ya sea con los envases o el
manejo correcto de los alimentos, los cuales son los siguientes: 1) retirar todos los envases
innecesarios y desecharlos en un cesto de basura que tenga tapa; 2) sacar de los envases los alimentos que haya encargado y colocarlos en un plato limpio; luego, desechar los envases; 3) limpiar los productos enlatados con un desinfectante antes de abrirlos o guardarlos; 4) lavar a fondo y con agua corriente los productos no envasados, como las frutas y las verduras; 5) lavarse las manos inmediatamente después con jabón y agua, o utilizar un desinfectante para las manos a base de alcohol.
Dengue al acecho
Mientras toda la atención se centra en la circulación del coronavirus en el mundo, hay otro problema que se instala cada año con la llegada del calor, aunque ahora estemos en otoño y su presencia no debería merecer atención: es el dengue, y las intensas y continuas lluvias
que cayeron en las últimas semanas en diversas regiones del país no hicieron más que atraer la presencia del mosquito Aedes aegyptis, transmisor del dengue y otros males relacionados.
Así hay que considerar los métodos existentes para evitar la propagación del dengue, que por ahora no tiene cura: 1) eliminar recipientes en desuso que puedan acumular agua (latas, botellas, neumáticos, etc.); 2) dar vuelta objetos que se hallen en el exterior y puedan acumular agua cuando llueve (baldes, palanganas, tambores); 3) cambiar el agua y limpiar bebederos de animales, colectores de desagües de aire acondicionado o lluvia que estén dentro y fuera de la casa, cada tres días, frotando las paredes de los recipientes con una esponja a fin de desprender los huevos de mosquito que puedan estar adheridos; 4) rellenar
floreros y portamacetas con arena húmeda; 5) mantener patios y jardines ordenados; 6)
limpiar las canaletas y desagües de lluvia de los techos y 7) tapar tanques y recipientes que se usan para recolectar agua.
POR G.A.