Con el paso del tiempo, los hombres se animaron cada vez más a realizar tratamientos faciales y cirugías plásticas. Las últimas tendencias internacionales en este área se impusieron poco a poco en Argentina, incrementando la demanda en los consultorios de especialistas.

"Hoy en día más del 13% de nuestros pacientes son hombres. Aunque parezca poco, hasta hace no mucho tiempo atrás, las mujeres eran las únicas que se animaban a las cirugías y tratamientos estéticos. Ahora, los hombres no sólo se animan a consultar sino también avanzan en la realización de tratamientos quirúrgicos y no quirúrgicos", comentó el doctor Gustavo Corrado (M.N. 113.095) especialista en cirugía plástica y tratamientos no invasivos con inyectables.

En este sentido, el interés del público masculino por tratamientos mínimamente invasivos del tipo inyectables que permiten la armonización de la cara no paran de incrementarse. "Estos procedimientos mejoran el aspecto de los pacientes porque permiten modelar las diferentes partes de la cara de una manera natural, que sin dudas es la última tendencia en el mundo: tratamientos tan naturales que no se noten", agrega Corrado.

Cirugías y tratamientos estéticos no invasivos

Uno de los tratamientos más elegidos por los hombres -según los expertos- es la armonización de la mandíbula y el mentón, un procedimiento estético en el que se utilizan productos como "el ácido hialurónico de diferentes densidades o la hidroxiapatita de calcio, diferentes tipos de bioestimuladores para mejorar de forma natural el contorno mandibular y la proyección del mentón". El mismo busca crear un perfil facial más equilibrado y armonioso, con facciones más definidas.

Se realizan con diferentes tipos de inyectables: ácido hialurónico, ácido poli – L láctico , hidroxiapatita de calcio, etc. Mientras que en el primer caso, en principio se utilizaba como relleno, hoy en día también se utiliza para lograr efecto tensor y de levantamiento. En el segundo caso, el ácido poli L láctico es un producto que actúa como bioestimulante del colágeno en las capas profundas de la piel.

En tanto, la hidroxiapatita de calcio es el principal componente de hueso y dientes que se utiliza en medicina estética para bioestimular , y también para voluminizar en distintas partes del cuerpo como cara, manos, brazos y abdomen.

"Es un procedimiento mínimamente invasivo que se realiza en el consultorio. La duración de los resultados puede durar desde 18 a 24 meses dependiendo del tipo de inyectable utilizado. Por supuesto cada caso es único, con lo cual es preciso consultar a un cirujano plástico que será el encargado de evaluar qué es mejor de acuerdo a las características propias de cada paciente", suma el especialista.

Los tratamientos inyectables de esta naturaleza forman parte de una tendencia que crece en el mundo. Los hombres, además de mejorar el aspecto de su mandíbula y mentón, se interesan en otros tipos de procedimientos que eran poco habituales. Entre estos se encuentran los tratamientos faciales no quirúrgicos como la rinomodelación y tratamiento de arrugas de la frente, el entrecejo y las patas de gallo; y quirúrgicos como lipoaspiración y la cirugía de párpados.

Mandíbula y mentón: dos símbolos de la masculinidad

Los mentones bien definidos y mandíbulas de rasgos marcados fueron percibidos históricamente como un signo de masculinidad e indicativo de fuerza. "Una mandíbula y el mentón prominente suele estar relacionado con la masculinidad, lo que se traduce en rasgos faciales más marcados; además, a lo largo de la historia, muchas culturas han valorado la fuerza y la determinación como características masculinas, de allí que un mentón firme puede simbolizar estas cualidades para algunas personas", advierte el especialista.

Al analizar la estética de los hombres que predomina en el cine y la literatura, entre los héroes y personajes masculinos que son protagonistas de las obras, se los suele presentar con cuerpos y rostos de líneas bien marcadas, reforzando la relación cultural entre un mentón o mandíbula definida y la masculinidad.