Alerta por brote: cómo prevenir la bacteria que causa faringitis aguda e infecciones y que ya provocó 16 muertes
El Ministerio de Salud compartió una serie de cuidados a implementar para evitar los contagios de esta bacteria que preocupa a las autoridades.
El Ministerio de Salud de la Nación alertó este fin de semana por el aumento del 281% de casos de Streptococcus pyogenes, también conocida como Streptococcus del grupo A, la causa más frecuente de la faringitis aguda y otras infecciones cutáneas.
La cartera que conduce Carla Vizzotti informó que en lo que va del año se detectaron 118 casos, de los que 16 fallecieron. La "Streptococcus pyogenes es una bacteria Gram-positiva y es la causa bacteriana más frecuente de faringitis aguda e infecciones cutáneas como impétigo, celulitis y escarlatina", aclararon mediante un comunicado.
El número de casos representa un aumento del 281% respecto al mismo período de 2019. El incremento se da en un contexto en el que la Organización Mundial de la Salud alertó que en Francia, Irlanda, los Países Bajos, Suecia y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte habían reportado una suba de enfermedades invasivas por estreptococo del grupo A.
¿Qué es el Streptococcus pyogenes?
El Streptococcus pyogenes Grampositiva es la causa más común de faringitis aguda y puede provocar una serie de síntomas, que incluye dolor de garganta, fiebre, cefaleas. A su vez, trae problemas gastrointestinales como molestia abdominal, náuseas y vómitos, enrojecimiento de la faringe y las amígdalas, mal aliento y aumento de tamaño de los ganglios en el cuello.
Esta bacteria también puede ocasionar diversas infecciones cutáneas, tales como impétigo, celulitis y escarlatina. En ocasiones, puede presentarse como una enfermedad grave o invasiva, con el potencial de causar condiciones potencialmente mortales.
El diagnóstico de la faringitis por Streptococcus pyogenes se lleva a cabo mediante cultivos bacterianos, un proceso que permite identificar la presencia de esta bacteria en la garganta del paciente. Una vez confirmada la infección, los médicos recurren al uso de antibióticos, en especial a la penicilina, como tratamiento efectivo contra esta enfermedad.
En este sentido, la prevención juega un papel crucial en el control de la transmisión. Las prácticas de higiene personal, como el lavado frecuente de manos, son fundamentales para evitar el contagio. Además, los expertos hacen hincapié en la importancia de evitar la automedicación con antibióticos en caso de síntomas, y en su lugar, buscar atención médica de manera inmediata.
Esta enfermedad puede presentar complicaciones graves si no se trata adecuadamente, como la fiebre reumática o la glomerulonefritis postestreptocócica. Por lo tanto, es vital que las personas estén conscientes de los métodos de transmisión, diagnóstico y prevención de esta enfermedad para evitar su propagación.
¿Cómo se contagia?
La faringitis por Streptococcus pyogenes, es altamente contagiosa, se propaga rápidamente a través del contacto directo con heridas infectadas y de partículas expulsadas al toser, estornudar o hablar. Los expertos advierten que el período de incubación de esta enfermedad puede oscilar entre 1 y 3 días, lo que subraya la necesidad de una rápida detección y tratamiento.
"El tratamiento de las personas infectadas con antibiótico durante por lo menos 24 horas elimina por lo general su capacidad de propagación", remarcaron.
Recomendaciones del Ministerio de Salud
- Evitar la automedicación con antibióticos y realizar una consulta médica para tener diagnóstico certero ante la aparición de síntomas.
- En el caso de recibir indicación médica de tratamiento antibiótico, es fundamental completar el esquema.
- Las personas enfermas deben evitar concurrir a lugares públicos (trabajo, escuela) y restringir los contactos hogareños.
- Lavarse las manos frecuentemente; no compartir objetos de uso personal (cubiertos, vasos, toallas, entre otros) y ventilar adecuadamente y de forma regular los ambientes en caso de estar contagiado.
- Todas las personas deben tener al día la vacunación antigripal y contra COVID-19, muy especialmente aquellas que presentan factores de riesgo.