Raquel "Kelly" Olmos será la nueva encargada de presidir el Ministerio de Trabajo nacional, a pedido del presidente Alberto Fernández. La economista de 70 años llega al cargo tras la inminente renuncia del ex titular del organismo, Claudio Moroni, quien venía amagando desde mitad de año con la partida de la función. Su asunción se suma a las de Victoria Tolosa Paz en Desarrollo Social y Ayelén Mazzina en el Ministerio de Mujeres.

Por tal motivo, el mandatario removió el fichero en búsqueda de un nombre acorde al cargo. A través de un comunicado, desde el Gobierno justificaron la elección por la edad, procedencia geográfica y trayectoria en el rubro, que permita "profundizar la amplitud de miradas y la eficiencia en la gestión".

El nombre elegido fue el de "Kelly" Olmos, quien el comunicado emitido esta tarde detalla que “es economista y es la actual vicepresidenta del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE)”. Además, en su currículum figura que ocupó un rol en el gobierno, en 2007 al 2009, como secretaria de Asuntos Municipales de la Nación, así como también se desarrolló en sus inicios como concejala y legisladora de la Ciudad de Buenos Aires. 

El nombre que figura en su documento de identidad es Raquel Cecilia Kismer, pero decidió portar el apellido de su esposo para afrontar su carrera política. Recibida como Licenciada en Economía en la Universidad de Buenos Aires (UBA), continuó su formación en la Universidad Torcuato Di Tella logrando una maestría en Economía Urbana y consiguiendo un posgrado en Formulación y Evaluación de Proyectos de Inversión (INPE-OEA-CEPAL).

Auto percibida como dirigente peronista , tal como lo anuncia su biografía de Twitter, inició su trayectoria política militando para el Partido Justicialista de la Provincia de Buenos Aires y acompañando la gestión de Carlos Menem, adheridos a los funcionarios del mandatario de turno, Carlos Corach (Ministro del Interior) y Jorge Domínguez (Ministro de Defensa).

La política bonaerense acompañó la precandidatura a Jefa de Gobierno porteño del conductor Gerardo Sofovich, en 2003, quien apostó por comandar la CABA bajo la bendición del expresidente riojano. En tal oportunidad, defendió a Menem cuando éste fue acusado en el escándalo referido a la venta de armas a Ecuador, Croacia y Bosnia-Herzegovina, siendo partícipe del escrache al juez Jorge Urso frente a su casa.

Además, acompañó la candidatura de Daniel Filmus años después (2007) también al cargo de Jefe de Gobierno porteño, y que le costó la renuncia de la titularidad de Autopistas Urbanas SA (AUSA), por su apoyo al funcionario. Otros nombres de políticos a quien le manifestó su apoyo es al de Guillermo Moreno, ex titular del INDEC, cuando éste iniciaba su trayectoria.

El nombre de Kelly Olmos resultó interesante para Alberto Fernández ya que ocupó un rol en su equipo elaborando una planificación en base al plano económico de su gestión, específicamente desarrollando proyectos en la rama de desarrollo y financiamiento.