Ocurrió el último lunes, durante la presentación de una serie de medidas para impulsar el crecimiento del sector tecnológico. Allí, el ministro Sergio Massa dijo que esta industria es uno de los "cuatro pilares de la economía global de los próximos diez años y tiene a la Argentina como jugador central”. Los otros tres, destacó, son "los 170 años de reserva de gas en Vaca Muerta", la generación de proteínas y la "revolución del litio".

Existen razones que justifican las palabras de Massa sobre ese mineral. La Argentina ocupa el cuarto lugar a nivel mundial en producción de litio y el segundo en reservas. Hay 50 proyectos en distintas fases de exploración y desarrollo en el país y dos ya producen: Mina Félix, en Catamarca, y Olaroz, en Jujuy, ambos con inversiones en procesos de expansión. Además, se espera que a fines de este año comience a producir el proyecto Cauchari-Olaroz, también en suelo jujeño.

Las estimaciones oficiales y privadas apuntan a que la Argentina tiene alrededor de 19,3 millones de toneladas de este mineral concentradas en Salta (41 %), Jujuy (37%) y Catamarca (22%). “Actualmente, somos el país más dinámico en cuanto a la recepción de inversiones en litio y el de mejores perspectivas de crecimiento por la cantidad de proyectos avanzados”, destacó Franco Mignacco, presidente de la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM), en diálogo con cronica.com.ar.

Litio: cuál es el escenario de esta industria en el país

Esos datos entusiasman al sector y, sobre todo, al Poder Ejecutivo, ante la necesidad de ingreso de divisas a la Argentina. “En lo que va de este año, las exportaciones de litio alcanzaron los u$s335 millones, con un crecimiento interanual del 203%. De sostenerse el marco nacional e internacional, para 2025 podrían multiplicarse por diez en relación con 2021”, puntualizó Mignacco. Y agregó: “Teniendo en cuanto sólo los proyectos que se pondrían en marcha de aquí a tres años, puede estimarse la generación de inversiones por 5.000 millones de dólares”.

Los dos proyectos activos producirán este año 37.000 toneladas de carbonato de litio, según la Secretaría de Minería. La puesta en marcha de Cauchari Olaroz aumentaría esa cifra a 80.000 toneladas en 2023. En ese contexto, las automotrices desembarcan en Salta, Jujuy y Catamarca. Ford y General Motors anunciaron inversiones semanas atrás, como antes ya lo habían hecho BMW y Toyota. Además, Tesla mira hacia yacimientos de esas provincias por las baterías de sus vehículos.

Como se observa, el sector atrae grandes compañías extranjeras. En junio pasado, la empresa china Ganfeng anunció que invertirá u$s960 millones para comprar el proyecto Pozuelos-Pastos Grandes, en Salta. Desde la cámara binacional resaltan el interés creciente del país asiático. “Es una de sus inversiones más recientes. De hecho, el 95% del litio importado por China proviene de la Argentina y de Chile”, señaló a cronica.com.ar la directora ejecutiva de la entidad, Alejandra Conconi.

Ahora bien, ¿cuál es el valor agregado que se les otorga a estas exportaciones? “El carbonato de litio que produce el país es fruto de un proceso químico-industrial que le incorpora valor de mercado”, comentó Mignacco. “A lo cual se suma la creación de empleo y oportunidades en zonas alejadas de otras posibilidades productivas. Tener una industria del litio activa motoriza las economías regionales”, agregó.

De aquí a dos años, Conconi pronosticó un boom de la industria en el litio en el país. Y analizó: “Es un sector en nuevo, en desarrollo. En algunas provincias empezaron a crear las tecnicaturas en procesamiento de salmueras de litio. Igual, debe haber un fuerte trabajo comunitario para que los jóvenes sepan que, según las proyecciones, habrá litio y posibilidades de generarlo entre 30 y 50 años. Eso va a ser toda la vida laboral de los que ahora están terminando la secundaria”.

Litio: en qué se utiliza este insumo

Distintos informes muestran el crecimiento sostenido de la demanda del litio en los próximos años, lo que representa una gran oportunidad para la Argentina, que integra el “triángulo” de este mineral junto con Bolivia y Chile. En la actualidad, este insumo es requerido especialmente para la fabricación de baterías y en menor medida para cerámica y vidrio, grasas y lubricantes, metalurgia, polímeros y tratamiento de agua.

En la Argentina, la producción de 'celdas' para baterías de litio comenzará en diciembre próximo, como parte de un proyecto desplegado desde YPF que busca un desarrollo integral. “Estamos avanzando rápidamente con la planta industrial. La obra civil ya está terminada en Berisso. En octubre llegarán los equipos y en diciembre ya estará la producción industrial de estas 'celdas' para las baterías de litio”, comentó Roberto Salvarezza, presidente de Y-TEC (YPFTecnología).

El proyecto, agregó, apunta a una producción completa “desde el salar hasta las baterías”.