Marcha universitaria: mientras llegan las columnas a Plaza de Mayo, vallaron la Casa Rosada
Mientras se despliega en la ciudad de Buenos Aires la movilización en defensa de la educación pública y en reclamo por el presupuesto, se refuerza el operativo de seguridad en la zona aledaña a la Casa de Gobierno donde se encuentra el presidente Javier Milei.
A horas del acto de cierre de la marcha universitaria y mientras llegan las columnas de manifestantes a la Plaza de Mayo, efectivos de la Policía Federal Argentina colocaron un vallado entre el escenario y la Casa Rosada, donde se encuentra el presidente, Javier Milei.
Cerca de las 14, fuentes de Presidencia confirmaron a este medio que el Jefe de Estado permanecía en su despacho de la Casa de Gobierno.
Fue cuando un camión comenzó a descargar a metros del ingreso, las clásicas vallas de cerca de tres metros de altura que utiliza la Policía Federal para acordonar un perímetro.
Las vallas se levantaron a la altura de la calle Reconquista, de espaldas al escenario que "mira" hacia el Cabildo, es decir, con orientación hacia la Avenida 9 de Julio.
Y a unos 100 metros de la Casa Rosada que se encuentra, como siempre, enrejada. Detrás de las rejas, se paró una línea más de unos 30 efectivos custodiando el ingreso.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, sostuvo esta mañana: “Es una marcha compleja, en donde muchos intereses se juntan para querer poner en jaque al Gobierno. Tenemos ciertas precauciones respecto de cuál es el objetivo final”.
Además, la ministra Bullrich ratificó que aplicará el protocolo antipiquete en caso de considerarlo necesario.
El operativo de seguridad ocurre en el marco de la masiva masiva Marcha Universitaria Federal, a la que se refirió el vocero presidencial Manuel Adorni, en su habitual conferencia de prensa.
“Para nosotros el tema presupuestario de la universidad y de los hospitales ha sido saldada”, marcó Adorni y aseguró que se trata de "una marcha política".
En tal sentido, se refirió a los dirigentes de la oposición que marchan este martes 23 de abril y a la columna de la Confederación General del Trabajo (CGT) y la de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) que se sumaron al reclamo.
“Son el tren fantasma", insistió Adorni. "Al menos de los que se comentó que iban a participar: Sergio Massa, Axel Kicillof y parte de su Gabinete, Máximo Kirchner, Martín Lousteau, Juan Grabois, dirigentes de izquierda, la CGT, las dos CTAs, movimientos piqueteros, organizaciones sociales", enumeró sin distinción de partido político.
“Si alguien cree que esas personas pueden quitarle legitimidad a un gobierno es extraño”, concluyó Adorni.