La jefa del Comando Sur de los Estados Unidos, Laura Richardson, arribó al país este martes, quien mantendrá reuniones en los próximos días con distintos funcionarios del Gobierno de Javier Milei para dialogar, entre otros temas, el rol de la base espacial china ubicada en la provincia de Neuquén.

La funcionaria del presidente estadounidense, Joe Biden, mantendrá encuentros en los próximos tres días con el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y con el ministro de Defensa, Luis Petri.

Una de las razones de la visita de Richardson a la Argentina es por la preocupación que mantiene el gobierno estadounidense por el funcionamiento de la base espacial china en Neuquén, ubicada en Bajada del Agrio, sobre la ruta provincial 33.

La base espacial china en Neuquén.

Vale recordar que durante el gobierno de Cristina Kirchner se le cedió a China un predio de unas 200 hectáreas por un lapso de 50 años, con un convenio firmado en el que el 10% de los recursos en la base los debe utilizar Argentina. Es por eso que la administración de Milei analiza proceder con una inspección técnica para verificar el cumplimiento del contrato.

El Embajador de Estados Unidos en Argentina, Marc Stanley, también manifestó su "sorpresa" por el rol de las "Fuerzas Armadas chinas operando en Neuquén, en secreto, haciendo quién sabe qué", en principio manipulando un "telescopio espacial". "Creo que los argentinos tampoco lo saben, y deberían entender por qué los chinos están desplegados allí", manifestó en las últimas horas.

Cabe destacar que el 12 de marzo pasado, Richardson habló en el Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes de su país y puso énfasis en la injerencia china en América Latina, y considerando la acción como "una amenaza".

En su alocución sostuvo que " Estados Unidos y la República Popular China están inmersos en una competencia geopolítica" y que los asiáticos, en nombre del Partido Comunista Chino (PCC) "buscan suplantar a Estados Unidos como líder mundial poder económico y militar".

Y concluyó: "La República Popular China está explotando la frágil seguridad ambiental y sacando provecho de la necesidad regional en inversión económica para ganar influencia y avanzar con su agenda maligna".