La Cámara de Diputados dio este miércoles media sanción a un proyecto de reforma de la ley de Alquileres 27.551, con 125 votos aportados por la mayoría de las bancadas opositoras, con excepción de la Izquierda y de La Libertad Avanza.

La iniciativa, que fue considerada en el marco de una sesión especial que duró cerca de cuatro horas, busca dejar sin efecto el ajuste anual de los valores de los contratos y el indicador para eso que rige en la actualidad, que es un mix que promedia la evolución del Índice de Precios al Consumidor (IPC) y el de variación salarial, determinado por el Banco Central de la República Argentina (BCRA).

En ese sentido, establece que la actualización de los montos sea cada cuatro meses sobre la base a un índice pactado entre las partes.

Determina que ese pacto debe establecerse al inicio de la relación locativa, pudiendo aplicar a tales efectos el IPC, el índice de Precios Mayoristas (IPM) o el Índice de Salarios (IS) -elaborados por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC)-; o una combinación de esos índices.

El proyecto aprobado en la Cámara baja, además, promueve la reducción del plazo de los contratos de 3 a 2 años.

Más detalles de la iniciativa

Según el texto, no podrá exigirse al inquilino el pago de alquileres anticipados ni depósitos de garantía superiores a un mes.

El propietario tendrá que hacerse cargo de las reparaciones urgentes en no más de 24 horas desde la notificación del inquilino y en no más de diez días corridos en caso de arreglos no imperiosos.

El contrato podrá ser resuelto antes de que expirara su plazo por parte del inquilino, pero no antes de los primeros seis meses de haber sido firmado. Si la notificación se realiza con al menos tres meses de anticipación, no corresponde ningún pago.