Por Santiago Tuñez.

El Indec dará a conocer este miércoles la inflación de agosto pasado. La cifra estará marcada por el salto devaluatorio del tipo de cambio oficial aplicado tras las PASO y la volatilidad en los dólares alternativos. Por lo pronto, el dato publicado por la ciudad de Buenos Aires se ubicó en el 10,8% durante el último mes y confirmó las estimaciones de las consultoras privadas que habían advertido sobre la aceleración de este indicador.

Más allá de los aumentos, las ventas crecieron en las principales cadenas de supermercados de todo el país. El consumo en grandes superficies trepó un 26,7% después de las elecciones primarias, en comparación con el mismo período del año pasado. Así lo señaló un informe privado que advirtió que los clientes optaron por stockearse frente a la inflación y decidieron comprar mayor cantidad de productos no perecederos.

Inflación: cuáles son los productos màs elegidos para stockearse

A la hora de abastecerse luego del 13 de agosto pasado, las preferencias de los consumidores fueron amplias, según los datos publicados en el relevamiento de la consultora Scentia. Y entre los productos que más eligieron para stockearse, aparecieron el café instantáneo, fideos, aceites, arroz y azúcar. Lo mismo ocurrió con la yerba, la harina y las latas de atún.

"Esta estrategia de los clientes de supermercados es lógica. Cuando tenés un proceso de desanclaje de expectativas inflacionarias y mucha incertidumbre, suele ocurrir que la gente quiera sacarse los pesos de encima", explicó Matías Bolis Wilson, economista jefe de la Cámara Argentina de Comercio (CAC), al ser consultado por cronica.com.ar.

Más allá de los productos perecederos mencionados, el informe recalcó que luego de la devaluación implementada tras las PASO aumentaron las compras de artículos de limpieza e higiene personal. En la mayoría de los cosas provienen desde Brasil y están atados a la cotización del dólar.

"La mayoría de las personas no tiene educación financiera o herramientas para poder cubrirse con otros instrumentos. Entonces, va al supermercado y compra mercadería que puede guardar por un tiempo en su casa. O compra dólares. Es un proceso que debería empezar a frenarse", analizó Bolis Wilson.

Por su parte, Fernando Savore, presidente de la Federación de Almaceneros de la Provincia de Buenos Aires, comentó que el escenario fue diferente en los comercios barriales. "La devaluación se produjo después de mediados de mes, por lo que nuestros clientes ya no tenían tanto dinero. En cambio, sí se notó un crecimiento de las ventas en la primera de septiembre y mayor salida de productos para stockear, como fideos, azúcar y puré de tomate", detalló al ser consultado por cronica.com.ar.

"Una de las peores cosas es la variabilidad de la inflación. No saber si vas a ser del 10%, 11%, 8% o 4%. Eso genera comportamientos anómalos. Del lado de los comercios, lo peor que pueden hacer es tener un stock creciente, porque, en realidad, su mayor activo son las ventas. Y la inflación es gran problema en ese sentido", consideró Bolis Wilson. Y cerró: "La incertidumbre económica tampoco brinda garantías sobre cómo serán los ingresos a futuro. Por eso, los consumidores también eligen stockear".

Por S.T.