Desde Europa, donde se encuentra concluyendo una extensa gira presidencial, Javier Milei se refirió a los recientes desarrollos en la economía argentina, haciendo especial hincapié en la inflación.

Según informes de la consultora Econométrica, la tercera semana de junio registró una estabilización en los precios de alimentos y bebidas, un sector crucial para los consumidores argentinos. Esto ocurre luego del positivo dato de inflación de mayo, que fue del 4,2%, influenciado por la recesión económica y los retrasos en los aumentos de tarifas y en las subas de impuestos a los combustibles.

El presidente expresó optimismo ante estos datos, destacando que indican un paso en la dirección correcta aunque reconoció que la inflación anualizada del 50% sigue siendo "un número aberrante". Comparando con la situación a fines de 2021, donde la inflación anual viajaba a una velocidad en torno al 17.000% por año, el presidente señaló progresos significativos bajo su administración.

"Venir de 17.000% y pasar a 50%, sin que haya una o dos hiperinflaciones en el medio que licúe los saldos reales y haga fácil la estabilización, o una situación tipo Plan Bonex con una expropiación, o que se hagan acuerdos y se fijen precios, o que se fije el tipo de cambio, que es la forma más fácil de estabilizar, es aberrante que no se reconozcan los logros", expresó el mandatario.

Durante su diálogo con un medio radial, Milei también comentó sobre su gira por Europa, a la que calificó como "un viaje excelente", y la cual incluyó reuniones con líderes clave como Isabel Díaz Ayuso en España y Olaf Scholz en Alemania. Según Milei, estos encuentros fueron "muy positivos" y contribuyeron a fortalecer las relaciones bilaterales y comerciales con Argentina.

Este lunes, el presidente argentino se encontrará en Praga con el primer ministro de la República Checa, Petr Fiala, y luego un "saludo privado" con su Presidente, Petr Pavel.

En relación con el encuentro del domingo con el representante alemán, Milei explicó que discutieron sobre "cómo estaba funcionando el programa económico", ya que Alemania "tiene un peso importante dentro del Fondo Monetario Internacional".

Por otra parte, el presidente también comentó sobre el último informe del personal del FMI y desestimó como "falsa" la interpretación que sugiere que el organismo está solicitando al Gobierno una devaluación del peso del 30%: "Cuando se lee correctamente el informe, no señala eso", afirmó.

E insistió en que "el problema de Argentina no es monetario, es un problema real de competitividad", además de asegurar que "eso no se arregla devaluando".

"Eso es como creer que usted puede incrementar la cantidad de carne que come por el simple hecho de que imprime dinero: la riqueza no se imprime, se genera", sostuvo el mandatario.

"Hay un tipo de cambio libre, y después hay otro que nosotros vamos controlando: puede haber fluctuaciones, pero no tienen que ver con las características del funcionamiento del sistema", agregó.

En cuanto al levantamiento del cepo cambiario, Milei evitó dar detalles concretos y sugirió que el tiempo y las condiciones económicas determinarán cualquier decisión futura al respecto: "El tiempo es de Dios, sino les estoy mintiendo".

Aún así, el presidente concluyó diciendo que "el levantamiento del cepo tiene que ver con terminar de sanear el balance del Banco Central, es decir, exterminar todos los mecanismos por los cuales se emitía dinero".