Al presentar el proyecto de ley "Cuidar en Igualdad" para la creación del Sistema Integral de Políticas de Cuidados de la Argentina, Alberto Fernández aseguró este lunes que el proyecto que se presentó esta tarde en Casa Rosada, es para que "se vuelva un derecho permanente en la Argentina y gobierne quien gobierne esto sea respetado".

Fernández sostuvo que la ley es necesaria "para que la suerte de las mujeres y los derechos de la igualdad no queden en una declamación política".

Cabe indicar que acompañaron en el estrado al mandamás nacional, los ministros de Mujeres y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta, y de Trabajo, Claudio Moroni; el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, y la titular del PAMI, Luana Volnovich.
Allí, Fernández remarcó que "es hora de igualar a las mujeres y todas las diversidades con los hombres", para que todos tengan mejores derechos.

Además, en su alocución en el Parque Colón de Casa de Gobierno, Fernández aseguró que esa ley es para que "se vuelva un derecho permanente en la Argentina y gobierne quien gobierne esto sea respetado".

En esta línea expresó: "Este proyecto sigue la senda que planteamos, la necesidad de seguir ampliando derechos, de reconocerle a la mujer que cuida lo que representan para el desarrollo social ese cuidado". Y más tarde subrayó que "es avance en la ampliación de derechos".


En su discurso, el presidente de la Nación destacó que el país "se diferenció de otros países por la forma que ha dado derechos" y ejemplificó a "la educación pública, que tuvo en dos buenos liberales, como (Juan Bautista) Alberdi, como (Domingo Faustino) Sarmiento, centrales para que esa educación publica se concretara, y la Argentina empezó a ser distinta porque todos podían acceder a la educación".


En tanto, reseñó que "pasaron los años y en 1918 la reforma universitaria tener libertad de cátedra" y luego Juan Domingo Perón "un día dijo que los hijos de los trabajadores pudieran ir a la universidad" y la "hizo gratuita".

También remarcó que la Argentina "se caracterizo por la salud pública" y destacó durante el gobierno de Perón la gestión del primer ministro de Salud de la historia del país, Ramón Carrillo, quien "llevó a la salud pública a todos los rincones de la Argentina".


Según afirmó, Fernández, "cada vez que la sociedad argentina tuvo derechos fue una mejor sociedad" y reseñó que desde el día que asumió la idea fue "ampliar derechos" porque "tendrá más facilidades para acceder a sus proyectos".

El proyecto de ley fue presentado esta tarde en Casa Rosada, para ser enviado el Parlamento, y promueve la creación del Sistema Integral de Políticas de Cuidados de Argentina, una iniciativa que surge para reconocer esta tarea como una necesidad, un trabajo y un derecho.

A su turno, Gómez Alcorta señaló que ese proyecto de ley propone modificar "licencias para madres o gestantes de 90 a 126 días, y licencias para padres o personas no gestantes, de dos a 15 días, y a lo largo de ocho años hasta 90 días", además de otras licencias especiales, como "90 días para adoptantes".

"Este proyecto amplia derechos, tanto en el sector privado como en la administración pública, agrario y de casas particulares; y los crea para monotributistas, monotributistas sociales y autónomos", para "un universo de ocho millones de personas", resumió la ministra.

OFICIAL: Información adicional sobre el trabajo de cuidado

Se denomina trabajo de cuidado a todas las actividades que cada persona realiza a diario para asegurar su propia subsistencia y la de los demás, como cocinar, limpiar, ordenar, hacer las compras o estar al cuidado de niñas, niños, adolescentes, personas mayores o personas con discapacidad que requieran apoyos de algún tipo. 

Son tareas relacionadas con la reproducción, el bienestar y el sostenimiento de la vida, porque todas y todos fuimos, somos y seremos cuidados en algún momento de nuestra vida.

 En Argentina, según el módulo de uso del tiempo que se incorporó en 2013 a la Encuesta Anual de Hogares Urbanos (EAHU), el tiempo social promedio dedicado al trabajo de cuidado no remunerado es muy desigual: las mujeres pasan 5,7 horas por día haciendo trabajo de cuidado no remunerado mientras que los varones dedican en promedio solo 2 horas diarias (INDEC, 2014). 

En la pandemia, de acuerdo con el Estudio sobre el impacto de la COVID-19 en los hogares del Gran Buenos Aires realizado por INDEC, la carga de cuidado aumentó y fue absorbida sobre todo por las mujeres (65% de los casos). Esa feminización del trabajo gratuito de cuidado no solo impacta en la vida económica de las mujeres, lo que explica gran parte de la “inactividad”, el desempleo y la informalidad en Argentina, sino que también produce pobreza y desigualdad en las familias. 

Los resultados preliminares de la Encuesta de Uso del Tiempo 2022 presentados el pasado jueves reproducen esa misma realidad, esto es, una mayor dedicación de las mujeres respecto de los varones a las responsabilidades de cuidado.

 El proyecto Cuidar en Igualdad reconoce el derecho de todas las personas a recibir y brindar cuidados, así como también el derecho al autocuidado; y promueve la igualdad de género porque hace visible el valor social y económico de los cuidados y los reconoce como un trabajo, ya sea que se desarrollen al interior de los hogares, en el ámbito comunitario, público o privado. 

En la actualidad, gran parte del trabajo de cuidados se realiza de forma invisibilizada y no remunerada. Además, contribuye a superar la división sexual del trabajo, que es la idea de que existen trabajos para mujeres y trabajos para varones y determina desigualdades en el acceso a derechos humanos fundamentales. Hoy, esta división hace que las mujeres y LGBTIQ+ se desarrollen en ámbitos mal pagos o precarizados y que sea sobre ellos que caiga en mayor medida la carga de cuidados.

La iniciativa propone proteger a todas las personas que cuidan, sea de forma remunerada o no, y también a todas las que necesitan cuidados: niñas, niños y adolescentes, con prioridad hasta la edad de 5 años inclusive; personas de 60 años o más, cuando lo requieran; y personas con discapacidad.  

Uno de los puntos sobresalientes del proyecto es la reforma al régimen de licencias. En la construcción de un sistema de cuidados, la política de licencias es una pieza central para alcanzar la corresponsabilidad entre los géneros. En la actualidad, Argentina se encuentra por debajo de las recomendaciones de la Organización Internacional del Trabajo ya que la licencia por maternidad es de 90 días (casi 13 semanas) y la de paternidad es de solamente 2 días. De aprobarse el proyecto, Argentina pasaría a estar a la vanguardia de los regímenes existentes en la región.