El decreto con el que el presidente de la Nación, Javier Milei, vetará totalmente la Ley de Financiamiento Universitario se publicará el próximo jueves a la medianoche en el Boletín Oficial, horas después de la marcha convocada por la comunidad educativa para este miércoles. Así lo ratifican en la Casa Rosada donde combinan esfuerzos para que la protesta pierda músculo y por sostener un piso de “héroes” para blindar la autoridad del Jefe de Estado.

Tal cual anticipó cronica.com.ar, en Casa Rosada está firme el rechazo total a la ley y están listos para recibir el impacto por una movilización que, advierten desde la comunidad educativa, será masiva contra el veto. Es el motivo por el cual, dicen en Balcarce 50, Milei decidió esperar y no vetar de inmediato. “No queremos hacer nada que incentive el conflicto. El reclamo es legítimo”, afirma un alfil del Presidente.

Nuestro problema no es con las universidades sino con un Congreso que no quiere entender que las leyes que sancionan tienen que estar acompañadas en detalle por de dónde sale la plata, sostiene y señala que “ya desde la semana que viene puede haber en el ámbito parlamentario alguna hendija para discutir la actualización de fondos en el Presupuesto 2025”.

El estrecho colaborador de Milei no oculta en diálogo con este medio que la creencia y preferencia del Jefe de Estado es por un sistema de educación privada, no de uno estatal pero reconoce las “restricciones constitucionales” con las que se encuentra esa idea del líder de La Libertad Avanza.

Universidades: En Casa Rosada reconocen que el PRO “no se comprometió aún" con blindar el veto 

En Casa Rosada advierten que si el   <a href='https://www.cronica.com.ar/tags/PRO'>PRO</a> no acompaña el veto a universidades
En Casa Rosada advierten que si el PRO no acompaña el veto a universidades "sería un acto de mezquindad".

Lo que preocupa en el entorno de Milei no es la bala política que se sumará al desencanto de un sector de la población por el primer veto a la ley que mejoraba jubilaciones -todo “gasto" de capital político “se puede recuperar”, dicen-; sino la posibilidad de que si el Congreso insiste, esta vez, no puedan blindar el veto

El Presidente vio amenazada su autoridad cuando la oposición buscó llegar a los dos tercios en el Congreso para insistir con la ley que subía los haberes jubilatorios. Cuando logró sostener sus decisión en “defensa del déficit cero”, celebró la importante victoria con un asado en Olivos e invitó a los 87 diputados "héroes”.

No todos los que facilitaron ese triunfo parlamentario dieron el presente en el asado pero los invitados “héroes” fueron la tropa propia completa de La Libertad Avanza, el MID y partes del PRO, del radicalismo y de Innovación Federal, entre otros peronistas de Tucumán y bancas de San Juan. 

Milei ya se entusiasmaban por entonces con lograr una alianza más “permanente” que facilitara un piso de 90 bancas aliadas al oficialismo. Lo que a futuro buscaría convertir en un interbloque.

Pero a horas de la marcha universitaria de este miércoles, desde el Congreso comenzaron a trascender alguna vacilación de la postura que el Presidente considera heroica. Los cinco radicales -para los que la defensa de la educación pública es una insignia del partido- estudian mantener la postura a favor de ley en cuestión, lo mismo ocurre con los 8 diputados del bloque de Innovación Federal. En Casa Rosada miran con lupa las filas del PRO.

El encargado de juntar voluntades en la Cámara de Diputados contra una eventual insistencia es el presidente de la misma, Martín Menem (La Libertad Avanza). En la Rosada casi que sería una sorpresa si los cinco radicales en cuestión no ayudaran a blindar el segundo veto de Milei. Y si en el PRO hay bajas, “sería un acto de mezquindad”.

El argumento para insistir de los opositores que se sumarían al peronismo y/o kirchnerista, Encuentro Federal, la Coalición Cívica y la izquierda es que el daño fiscal es mucho menor que el de la ley de movilidad jubilatoria. Se calcula que la Ley de Financiamiento Universitario se traduce en el 0,14% del PBI

Finalmente, el vocero presidencial Manuel Adorni destacó los esfuerzos para quitarle músculo a la marcha universitaria: “el Ministerio de Capital Humano hizo todos los esfuerzos para mejorar los salarios de los docentes y no docentes: ofreció un incremento salarial del 6,8%, se ancló el salario de los docentes con los de la administración pública para que cobren en tiempo forma (antes cobraban a un promedio de 68 días, hoy lo hacen en un promedio de 4 días) y se realizaron incrementos en los gastos de funcionamiento”.