"Tenemos pánico", dice la ex mujer del médico acusado de abusar de sus hijos que está en prisión domiciliaria
Además le dieron permiso para salir a trabajar. Es ginecólogo y obstetra. "Mi hijo tiene las pruebas que lo condenan en su cuerpo, es capaz de cualquier cosa, de eliminarme a mi y a él", sostiene la mamá.
La Justicia otorgó la prisión domiciliaria al obstetra y ginecólogo Pablo Ghisoni, médico obstetra de Temperley acusado de abusar de sus hijos y su ex mujer. "No solo eso, si no que le dieron salidas laborales de lunes a lunes. Atender bebés recién nacidos, mujeres embarazadas, adolescentes", dice a cronica.com.ar la ex mujer Andrea Vazquez.
"La prisión preventiva la estaba cumpliendo en una clínica siquiátrica que pagaba su obra social. Cuando la jueza no se la dio dijo que la pena en expectativa es de 8 a 40 años, por lo que hay riesgo de fuga. Él tiene mucho dinero. Decía en las redes que la jueza estaba en la industria del juicio, había colgado pasacalles en la escuela de la hja, por que podía entorpecer al investigación. Él decía que si volvía al buzón, sabia lo que tenía que hacer. Nunca estuvo en prisión, lo mandaron a una clínica. Se burla de la Justica", sostiene la mujer.
Durante esos dos años que estuvo internado y preso. "Mandó a poner pasacalles en la escuela de los chicos, publicó fotos nuestras comiendo para demostrar que nos seguía. Casación dice que tiene buena conducta y le dan el beneficio. Ya apelamos. Es nulo, la Ley de Víctimas dice que nos tienen que escuchar y ni siquiera nos notificaron. Me enteré porque desde un teléfono desconocido me mandaron una foto de el brindando con vino con mi hijo mayor al lado", dice Andrea, es el único de los tres que no está con ella.
"Mi hijo menor dijo ante 18 funcionarios de la Comisión Interamericana que lo único que quiere que se pudra en la cárcel y vivir en paz. El 80 por ciento de su vida está atravesada por lo judicial. Declaró dos veces en Cámara Gesell cuando tenía que ser una, se sometió a pericias físicas. Cómo le explico ahora", se pregunta la mamá, sostiene que en la casa que está viviendo hay menores.
"No tenemos fecha de juicio. En 2016 comenzó la causa. Hay plata, poder, influencias, muchas se atendían con él", sostiene. "Mi hijo del medio dice, él es más libre que yo, puede salir de lunes a lunes, yo no puedo ir a lo de mis amigos por miedo a cruzármelo", relata.
"Vivimos con pánico. Los tres tenemos botón antipánico porque nunca frenó el hostigamiento. El dice que está internado, que nosotros inventamos, pero están las pericias", afirma la mamá que por ser víctima "a mi me hizo de todo", podría no estar en el juicio, pero que lo va hacer "por mis hijos".
"Vivimos en un barrio privado, pero sabemos que cuando estos hombres quieren no hay dispositivo que los frene. Mi hijo tiene las pruebas que lo condenan en su cuerpo, es capaz de cualquier cosa, de eliminarme a mi y a él. Les dijo a ellos que me iba a matar de un tiro en la cabeza", cuenta Andrea y afirma: "Responsabilizo a Casación de lo que me pase, y el daño ya está hecho, no somos libres de violencia. Tengo miedo que nos mate”.
Los chicos están en juicio para sacarse su apellido cuenta la mamá, que pide que la Corte falle "rápido".
La Cámara de Casación Penal de la Provincia de Buenos Aires dispuso el arresto domiciliario para Ghisoni, el médico obstetra de Temperley que permanecía recluido en una clínica psiquiátrica donde cumplía prisión preventiva hace casi dos años.
La jueza del Juzgado de Garantías 6 de Lomas de Zamora, Laura Ninni, había dispuesto la elevación a juicio del caso. Sin embargo, el proceso se encuentra detenido a la espera de la resolución a cargo de la Cámara de Apelación y Garantías Sala 3, tras la apelación de la defensa del imputado.
El hombre fue detenido a fines de junio de 2019. En ese momento, la fiscal de la causa a cargo de la UFI 6 de Lomas de Zamora, Mabel Lois, ordenó en primera instancia su detención, y luego que sea alojado en una clínica psiquiátrica con custodia policial a raíz de que las pericias psicológicas habrían determinado que “era peligroso para sí mismo y para terceros”, debido a la posibilidad latente de un intento de suicidio.
Ghisoni afronta la acusación por el delito de “abuso sexual agravado con acceso carnal por la situación de convivencia existente por tratarse de un descendiente, reiterado en varias oportunidades”.