Concurrió a una entrevista laboral con la ilusión de conseguir un trabajo en un local de venta de indumentaria médica, pero fue drogada y abusada sexualmente por un hombre que la había contactado por medio de las redes sociales y que, después de ser detenido, quedó en libertad.

La víctima del ataque fue una joven venezolana, de 18 años, que se había presentado el sábado último, poco antes del mediodía, en un comercio situado en la calle Paso al 600, en el barrio porteño de Balvanera.

La madre de la muchacha declaró que su hija había sido contactada por el acusado del abuso sexual, al parecer para proponerle el empleo durante una cena. La piba se negó, pero acordó ir al comercio.

El encuentro generó algunas sospechas en la madre, que le pidió a su hija que antes de entrar le enviara una foto del comercio y los datos de sus dueños. La joven pasó la supuesta entrevista laboral y comenzó a trabajar ahí mismo minutos después.

Le ofreció un "sospechoso" vaso de gaseosa

Según la madre de la víctima, el acusado le ofreció varias veces “un vaso de gaseosa o de jugo” que, finalmente, aceptó. De acuerdo al relato, tras beber el líquido, la chica comenzó a sentirse mareada, pero antes alcanzó a enviarle un mensaje a su hermana explicándole la situación. “Creo que el dueño de donde trabajo me drogó porque me siento mareada”, expresó la joven en el mensaje que le envió a través de WhatsApp y agregó la dirección en donde se encontraba.

La hermana de la joven avisó de manera urgente a su madre, quien se encontraba cerca del comercio. Fue ella quien denunció el hecho a la policía, que encontró el comercio con las puertas cerradas. Finalmente, los agentes policiales ingresaron, detuvieron al hombre y encontraron a la joven en el fondo del comercio con el torso desnudo y, supuestamente, bajo el efecto de las drogas consumidas.

La joven fue llevada por el SAME al Hospital Ramos Mejía, donde fue atendida por una médica legista para establecer si sufrió un posible abuso sexual. Además, fue asistida por un gabinete psicológico.

El hombre detenido fue imputado por el delito de “abuso sexual simple”, aunque la jueza Karina Zucconi decidió liberarlo. “Mi hija está muy mal porque le dieron la libertad al hombre. Ella está ahora con asistencia psicológica”, indicó la madre de la joven. Por último, pidió justicia para su hija: “Es un violador que no debería estar suelto, sino preso esperando el juicio. La Justicia nos dijo que está libre porque no tiene antecedentes” penales, relató.