Delincuentes robaron la camioneta de un joven que la había dejado estacionada en la vereda de su casa, en en sur del Gran Buenos Aires: se trata una mini Volkswagen T1 Bus modelo 63 que le habían dado como regalo de cumpleaños, que restauró de a poco para usarla en su trabajo, y con la que soñaba recorrer el país.

En diálogo con cronica.com.ar, Santiago Iglesias, el dueño de la camioneta "retro", contó que sigue sin aparecer, aunque en las últimas horas, recibió un llamado misterioso. "Me dijo que le diga donde la deja y que el la lleva a donde sea, a cambio de 100 mil pesos", señaló.

"Le dije que me llamara en media hora, que yo iba a tratar de buscar la plata, pero me dijo que no, que en media hora la iba a prender fuego", agregó y estimó que "debe ser alguien que se enteró y que se quiere aprovechar de la situación"

El robo ocurrió el martes 25 de julio a la noche, en Avenida Eva Perón, entre Carlos tejedor y Bernardo de Yrigoyen. Como no tiene garage, la camioneta quedaba en estacionada en la calle, pero ese día, se llevó la sorpresa cuando estaba por ir a trabajar, que ya no estaba.

La camioneta fue robada de la puerta de la casa de su dueño.

La víctima realizó la denuncia, y comenzó una campaña de visibilización en redes sociales, para pedir la colaboración de los vecinos que la hayan visto en algún lugar. Sin embargo, hasta ahora no tuvo novedades concretas más que el llamado para pedirle dinero.

"Me gustan ese tipo de camioneta desde chico. Mis viejos y mis abuelos me pudieron comprar una que había que restaurar, y la empezamos a arreglar de a poco", recordó. "Tenía pensado ponerla en condiciones para viajar con la camioneta al sur del país", lamentó.

Además, explicó que la camioneta la usa para trabajar: "Soy músico y sonidista y transporto los equipos". 

"Este último año, junto a mi pareja, empezamos a emprender en el negocio de venta de insumos de impresión 3D, con la que yo hago el reparto", añadió.

El hurto de automóviles fabricados hace más de tres décadas es una modalidad delictiva en incremento, ya que los delincuentes los desguazan para su posterior venta de autopartes en el mercado negro, a precios exorbitantes.

De esta manera, constituyen una obsesión de para los ladrones por su costo de venta, sino por sus partes, que son complejas de conseguir en el mercado, dado que tampoco se fabrican, y resulta casi imposible importarlas.

Crónica Policiales: todas las noticias de hoy