La Justicia sobreseyó a María Ninfa “Nina” Aquino, la empleada doméstica que estaba imputada y permaneció 13 días detenida, al ser considerada la "entregadora" por el crimen del matrimonio Del Río, asesinado en agosto pasado en su casona de Vicente López.

El juez de Garantías 1 de San Isidro, Ricardo Costa, dio lugar a la solicitud planteada por la defensa particular, avalado en un dictamen por los propios fiscales, y dictó el sobreseimiento “de manera total” de Aquino.

“(…) ante la imposibilidad de comprobar, siquiera en forma precaria, la participación de Aquino Chamorro el hecho descrito por el acusador público, se impone sin más dictar el sobreseimiento de la intimada, (…) desde que no aparece razonable, objetivamente, prever la incorporación de nuevos elementos de cargo, que modifiquen el cuadro hasta el momento existente”, señaló el juez, informó la agencia de noticias Télam.

“Así, llegada esta instancia del proceso, advierto que se configura un cuadro de certeza negativa que me permite afirmar que la señora Aquino Chamorro no ha participado en el hecho (…) no solamente por haberse desvirtuado la incriminación que le realizó Martín Del Río, el hijo de las víctimas procesado con prisión preventiva por el doble crimen, sino también por haberse corroborado el descargo que aquella ensayara al deponer en forma injurada, rechazando esa imputación”, indicó.

En el mismo fallo, el juez tomó conocimiento de la prórroga de la investigación penal preparatoria por dos meses dispuesta por la fiscal Marcela Constanza Semería.

Por su parte, el abogado Hugo López Carribero, defensor de “Nina”, adelantó a la agencia de noticias Télam que la mujer dará este martes a las 8.30 una conferencia de prensa en su estudio jurídico situado en Monseñor Marcón 2584, de San Justo, partido de La Matanza, donde contará “toda la verdad” sobre el caso.

La fiscalía pidió el sobreseimiento

Los fiscales que investigan el asesinato del matrimonio Del Río, dictaminaron el 7 de febrero pasado a favor de un pedido de la defensa para que sea sobreseída de la causa por el doble homicidio.

En la solicitud de tres fojas al que tuvo, el fiscal Alejandro Musso consideró que "de acuerdo al estado actual de la investigación y lo sostenido por el equipo de colegas, en este estadio procesal corresponde hacer lugar al sobreseimiento de Nina Aquino" en la causa por el doble crimen de José Enrique Del Río (75) y María Mercedes Alonso (72).

De esta manera, el equipo de fiscales que integran, además de Musso, sus colegas Semería y Martín Gómez, avalaron lo solicitado seis días antes por el abogado López Carribero.

"Cierto es que en los albores de la investigación y de acuerdo a las probanzas colectadas, Aquino inexorablemente ha sido vinculada al quehacer delictivo, no solo por las diligencias preliminares efectuadas sino además el halo de sospecha que claramente, a la luz de la sustanciación de la investigación, se ha visibilizado como una construcción del ahora imputado Martín Del Río", dijo el fiscal Musso en el dictamen.

El 3 de noviembre del año pasado, el juez Costa ya había rechazado un planteo similar presentado por la defensa de Aquino para que sea sobreseída, aunque en esa oportunidad, los fiscales se habían opuesto a la libertad de Aquino, la mujer de nacionalidad paraguaya que trabajaba hace 12 años en la casa de las víctimas y estuvo 13 días detenida acusada como "entregadora".

En su resolución de aquel momento, el juez consideró que era "prematuro" dictar el sobreseimiento de la empleada doméstica.

El doble crimen del matrimonio

Del Río padre y su esposa Alonso aparecieron asesinados -él de tres balazos y ella de uno- el pasado 25 de agosto en el interior de su automóvil en el garaje de su casona de la calle Melo 1101, de Vicente López.

Si bien la empleada "Nina" Aquino fue la primera detenida, el juez de la causa la liberó por falta de pruebas y el 7 de septiembre los fiscales detuvieron al hijo menor de los fallecidos, Martín, como supuesto autor de un doble parricidio.

Con base en prueba fílmica, tecnológica y testimonial recopilada por la fiscalía, el juez Costa dictó la prisión preventiva de Del Río como autor de un "doble homicidio calificado por alevosía, por el vínculo, por el uso de arma de fuego y por ser criminis causa" (matar para lograr la impunidad), delito que prevé como única pena la prisión perpetua.

Para los fiscales, el móvil fue económico y está vinculado a la frustrada operación inmobiliaria por la cual las víctimas pensaban que ese mismo día iban a mudarse a un lujoso departamento del barrio porteño de Núñez, valuado en más de un millón y medio de dólares, y que Del Río hijo nunca pudo concretar.