Dahiana Gisela Madrid la enfermera que atendía a Diego Maradona en su internación domiciliari,  declaró ante los fiscales  y su abogado pidió que estuviera presente el juez Garantías que lo hizo de forma virtual.  

Declaró que la única indicación que tenía los médicos era la de administrarle la medicación y “no había ningún acondicionamiento” para la patología cardíaca. Para ella era como “una bomba de tiempo”.


El 13 de noviembre, primer día que fue a trabajar a la casa de l barrio San Andrés, fue la primera y “única vez” que pudo tener contacto personal con Maradona, tomarle los signos vitales y bañarlo "Me habian dicho que nosotros los enfermeros estábamos para dar la medicación en tiempo y forma para que el paciente no se automedique que no era necesario que se controle", dijo la enfermera en la declaración indagatoria por el delito de "homicidio simple con dolo eventual" a la que tuvo accceso cronica.com.ar

“Nosotros solo teníamos la medicación. Nada más. Había que hacer lo que el paciente quería, si el paciente se dejaba tomar los controles. Todo según lo que el paciente quería o disponía. No había que molestarlo, no había que ingresar a la habitación, solo darle la medicación en tiempo y forma únicamente”, agregó.


Si vos sos un paciente cardíaco sabés que sos una bomba de tiempo, pero no había ningún acondicionamiento para la patología del paciente . Lo único que había era control de signos vitales. Un termómetro y un saturómetro”, afirmó Madrid en torno a las falencias que notó que había en la casa de Tigre.

También dijo que “faltaba un desfribilador, un tubo de oxígeno, y que “no había un monitor cardíaco que era necesario siendo un paciente cardíaco”.

"Había una hoja pegada en la heladera dividida en partes con la medicación correspondiente el nombre de cada medicación y separado en desayuno, merienda y cena, asimismo, sobre cada línea de pastillas decía si había que darle una entera, media o la dosis, pero la hoja no tenia ninguna firma ni sello de ningún médico", sostuvo.

El fin de semana ellla no trabajó y regresó el lunes 16. "El paciente se levanta, yo me acerco, me saluda, me da la mano, un beso, ingresa al baño y cuando sale del baño me dice que me cambie y que me vaya, que me retire, entonces yo lo miro al chico de seguridad y el chico de seguridad me dice que vaya para afuera. Me siento en una reposera, el paciente se vuelve a acostar, sale el de seguridad nos ponemos a dialogar y Diego Maradona escucha que estaban hablando se vuelve a levantar con un cargador en la mano le dice que me vuelva a decir que me vaya y me quería tirar con el cargador por la cabeza pensando que era mio", recordó. 

A partir de ese día no entró más a la habitación, se quedaba en la cocina o en el parque. "Ingreso al baño y el escucha ruido y dice Monona, la cocinera, y yo le dije no Diego soy Dahiana y me dijo no vos no, asique fui afuera le dije que la llamaba, ellos ingresaron, el paciente se había caído, cuando quise a entrar a la habitación me dijo que no, que no entrara, que me retirara, cuando lo acostaron en la cama se fijaron si se había golpeado, refirieron que se había golpeado la parte derecha", sostuvo.

"Le dije a Maxi que lo conveniente era llevarlo a una guardia o a una clínica para que le realicen una tomografía porque a mi me habían pasado el diagnostico por un hematoma subdural y si el paciente se había golpeado la cabeza lo mas aconsejable era hacerle una tomografía. Maxi dijo que no, que iba a salir en los medios y se puso a hablar por teléfono pero no se con quién. Ese día vino Agustina Cosachov y Carlos Diaz, Diego no los quiso atender, a la tarde, después del mediodía llego Giannina, no recuerdo si ese día vino con su hijo que Diego tampoco quiso ver y luego llegó Jana", declaró sobre el día de la caída  a poco de haber siido operado.

"Cuando vinieron el clínico y el nutricionista se presentaron, hablaron con las hijas, llegó Leopoldo Luque, entró a la habitación, Diego estaba de mal humor lo echó y lo empujo. Luque se sentó en la cocina y se puso a comer galletitas, él se asomó desde su habitación y le dijo a Luque que se vaya, le dijo exactamente te voy a cagar a trompadas, el nutricionista y el clínico no pudieron ingresar porque él no quería ser atendido por ellos, creo que la que entró fue Giannina a hablar con él a explicarle y no quiso", sostuvo.

En cuanto a la alimentación, se sabe que ese último día comió un sanwich de miga, dijo: "El nutricionista hablaba con Monona, le dijo que él tenia preparado un plan una dieta de lo que el paciente podía o no comer".

"El día 25 de noviembre sabia que iba a venir la Dra. Cosachov, eran las 10 de la mañana por lo que había que darle la medicación, le mandé un mensaje a Agustina para ver a que hora llegaba porque la orden era no despertarlo y demás entonces era para que se ingresara solamente una vez a la habitación.  Agustina me dijo que estaba en camino, llegaron ella y Carlos Diaz", relató sobre el día de la muerte del 10.

"Estábamos todos afuera en la galería, le explicaron que era lo que pretendían para que Diego se quisiera levantar de la cama, Agustina modifico la medicación, se la preparé, y salimos para el lado de la galería. El psicólogo se levantó e ibamos a ingresar, me dijeron que no ingresara y me quedé con Monona preparando el desayuno porque si se lo iba a despertar era el momento para darle de comer", recordó.

 "El paciente no respondía, estuvieron cinco minutos, salen y dicen no se despierta, no contesta, me asomo a la puerta balcón y le digo a Jony le damos la medicación, entra Jony y Maxi y no se cual de los dos dice que el paciente estaba inconsciente. Entré a la habitación el paciente estaba en paro, me subo arriba de la cama para reanimarlo, lo destapo, lo toco tenía un brazo fuera de la cama caído. Agustina no sabía qué hacer. Empiezo a hacer las maniobras y pido llamen a emergencia o a la ambulancia y le sigo haciendo maniobras, le pido al de seguridad para que sea mas eficiente el RCP que le haga respiración boca a boca, le explico cómo tiene que hacer, como poner la cara, la boca", sostuvo.

"En un momento no recuerdo quién trae el teléfono en altavoz y era Luque comienzo a hablar con él y le digo que el paciente esta en paro, continuo con las maniobras de reanimación. Luego llega un señor con un estetoscopio que después supe que era un vecino médico del barrio, dije que continuáramos haciendo RCP, cuando el de seguridad se cansaba cambiaba con Monona ella hacia un poquito y volvía el seguridad, yo seguía haciendo maniobras, en un momento Agustina hizo un ratito y no las estaba haciendo bien a las maniobras entonces le dije que seguía yo",  sostuvo.

"Depués llegaron las ambulancias, yo me quede en la habitacion haciendo todo lo que necesitaban, pedí por favor que lo intubaran, porque debían pasarle el oxigeno y no se pudo hacer. En un momento salí de la habitación y le dije a Jony y Maxi que los médicos querían parar con la maniobras, que le dijeran que no porque uno nunca quiere que un paciente fallezca", recordó.

"Siguieron intentando, entra otro médico a inturbarlo tampoco podía, buscaron tubos mas chicos, después salió  una médica habló con la familia y en un momento dijeron que ya esta y dieron la hora del óbito", declaró.