Diego Maradona: las indagatorias abren más puertas en la investigación
Ricardo Almirón y ya su testimonios no solo complicó a otros de los imputados, si no que habló de papeles que el 10 no firmó
Comenzaron las indagarotorias por la muerte de Diego Armando Maradona. El primero es sentarse frente a los fiscales fue el enfermo Ricardo Almirón y ya su testimonios no solo complicó a otros de los imputados, si no que abrió más puertas en la investigación.
Por eso las indagatorias se realizan día por medio, porque los ficales necesitan analizar que dice cada uno en función del expdiente.
Almirón tenía el turno de 18,30 a 6, 30. Una de la cosas que dijo es que sintió que ninguno de sus superiores se preucupó por la salud del 10.
A pesar de sus pedidos, declaró que nunca vio la historia clínica. Que jamás vio un cardiólogo a pesar de que lo consideraba necesario.
Almirón reclamó un desfibrilador, oxiogeno, control de monitoreo cardiológico. Nunca se le fueron entregado, ni estaban en la casa según declaro. Es más lo primeros días uso sus elemetos para controlar la presión y el oxigeno.
Aquel 24 de noviembre cuando tomó su turno controló los signos vitales a los 18, 30. Ingresó otra vez a las 22 y también estuvo con él. Pero al dejar su turno a las 6,30 lo vio desde la puerta y lo creyó dormido.
La enfrmera que lo seguía en el turno no entraba en la habitación porque Maradona no quería.
Recién a las 12 ingresaron a la habitación. Por lo que hay acreditado en el expediente hasta ahora desde las 22 que lo vio Almirón nadie más entró al cuarto hasta las 12.
En un grupo de whatsapp en que estaba Almiron su jefe Mariano Perroni, de la médica de la prepaga Nancy Forlini , de la psiquiatra Agustina Cosachov y los otros enfermeros, el informaba la situcaión de Maradona. Allí según declaró avisó que la frecuencia cardíaca de Maradona era alta.
Para los investigadores esta declaración complica la situación de estos tres médicos y no saben por qué el Leopoldo Luque no estaba en ese grupo.
Por otra parte esta internación domiciliaria debía contar con enfermero y acompañante terapeutico las 24 horas, un familiar que en este caso era el sobrino, un custodio, la cocinera para una alimentación adecuada para el paciente. Y los médicos que debían verlos con regularidad. Casi nada de lo acordado se cumplió según la investigación.
Según consta en el expediente el 18 de noviembre Maradona echó al clínico. Que regresó al día siguiente pero según la información con la que cuentan los investigadores fue Cosachov quien no lo dejó ingresar, se supone que porque el paciente no quería.
Pero hay otro punto grave en la declaración de Almirón. Todos los días él tenía que llenar una planilla con diferentes datos, que también tenía que estar firmado por el paciente. Luego de la muerte de Maradona él entregó las planillas. Esos papeles tienen la firma en diagonal del Diez. Otro tema que deberá ser investigado.