Este lunes, un hecho de delincuencia tuvo como víctima principal al doctor Carlos Sabagh cuando un ladrón le robó su teléfono celular mientras desempeñaba sus funciones en un hospital del barrio Nueva Córdoba, pero el médico cirujano lo identificó y logró retenerlo.

El episodio sucedió a plena luz del día del Sanatorio Aconcagua, entre pacientes y profesionales de la salud en el nosocomio ubicado en Rondeau 455. Según testimonio del médico, el delincuente entró a su consultorio y le sustrajo el aparato telefónico personal.

Cuando Sabagh se retiró de su despacho, el ladrón aprovechó el momento exacto para ingresar y tomar el celular, pasando desapercibido ante la visión de los presentes.

Sin embargo, el médico reaccionó al hecho y pudo identificar al ladrón cuando lo vio salir de su consultorio, y con ayuda de pacientes que esperaban en la sala de espera pudo retenerlo antes de lograr escaparse del nosocomio.

Robo al doctor Carlos Sabagh: la palabra de la víctima, en primera persona

En diálogo con Canal 12 de Córdoba, Sabagh contó el suceso en primera persona cuando se encontraba en el primer piso del sanatorio, y en un momento de la jornada, salió de su consultorio para hablar con su secretaria en un despacho contiguo. 

"Cuando veo que están gritando la gente en la sala de espera, me asomo y sale un tipo de mi consultorio, en dirección hacia las escaleras para irse. Salí atrás de él a perseguirlo y logramos reducirlo entre todos", comentó el especialista en salud ante lo sucedido en la jornada de hoy.

"Se había llevado mi celular", comentó Sabagh al medio cordobés, en el que agradeció la "solidaridad" de la gente que lo ayudó a recuperar su teléfono. "Lo ingresamos nuevamente a la clínica y ya había un patrullero, entró un policía, lo esposó y se lo llevó", declaró.

También contó otro momento inusual del suceso: "El tipo tiró mi celular y el de otro, y hasta el de él. Yo le digo al policía 'no sé de quién es', y el ladrón dice 'es mío'. Fue hasta medio bizarro el momento".

Sobre la consulta si el ladrón llevaba consigo un arma, Sabagh reflexionó acerca de lo que podría haber tenido un desenlace peor: “Después lo pensé, no medí eso. En ese segundo no pensás, ¿Qué vas a pensar? Te está llevando el celular, lo estás viendo”.