Esteban Alvarado: ordenan el traslado del capo narco a otra cárcel y aumentan los controles penitenciarios
El criminal había intentado fugarse en helicóptero. El capo narco rosarino tendrá estrictas medidas de seguridad dispuestas por la Justicia.
Será traslado del capo narco Esteban Alvarado desde la cárcel de Ezeiza a otro complejo penitenciario donde puedan cumplirse mayores medidas de seguridad. Así lo ordenó el Tribunal Oral Federal 2 de Rosario y estableció una serie de restricciones y controles hasta que se haga efectiva la medida.
La resolución del tribunal dispuso "con carácter de urgente" el "traslado de Esteban Lindor Alvarado a otra unidad de detención del Servicio Penitenciario Federal" (SPF). Ordenó que la nueva prisión que lo aloje "deberá dar cumplimiento a todas las medidas indicadas" en una resolución anterior.
Las medidas fueron solicitadas por el fiscal general de Rosario, Fernando Arrigo, quien luego de visitar el penal de Ezeiza entendió que no se cumplían con las condiciones de seguridad para un "preso de alto perfil" como Alvarado.
"El Esteban", como lo llaman en el mundo del delito, fue condenado en junio del año pasado por la Justicia a prisión perpetua como jefe de una asociación ilícita y por los delitos de homicidio, amenazas, daños y lavado de activos, entre otros.
Unos días después, el TOF2 lo condenó a 15 años de prisión por transporte de estupefacientes, a raíz del caso de un camión con media tonelada de marihuana que viajaba desde Rosario a la Patagonia.
En marzo pasado, la Procuraduría contra el Narcotráfico (Procunar) y la Policía Federal impidieron una posible fuga de Alvarado de la cárcel de Ezeiza. Según la investigación preveía llevar adelante con un helicóptero que iba a descender en el campo de deportes de la prisión, para llevarlo hasta la localidad entrerriana de Gualeguaychú.
Tras la visita a la cárcel, el fiscal Arrigo obtuvo una resolución favorable del TOF2 a su planteo para aumentar las medidas de control sobre Alvarado, particularmente acerca de las comunicaciones al exterior.
Esa resolución dispuso alojar a Alvarado "en una celda individual" o, de no ser posible, que se lo reubique "en otra sección del establecimiento cuyo control sea riguroso y estricto, y no mantenga contacto con otros internos procesados" por narcotráfico o vinculados al crimen organizado.
También que se le practiquen requisas sorpresivas "en forma aleatoria" y "dar estricto cumplimiento a la prohibición de las comunicaciones móviles". Les planteó a las autoridades del SPF la colocación de inhibidores de señal en el pabellón o el módulo donde está alojado Alvarado. Esa medida no es posible por la cercanía con el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, atento a que afectaría sus comunicaciones.
Ahora, frente a un nuevo planteo del fiscal Arrigo por la falta de cumplimiento de algunas de esas medidas, se dispuso el traslado urgente de Alvarado a otra cárcel federal.
Entre otras disposiciones, estableció que se confeccione una grilla "con nombre y apellido de las personas -con sus correspondientes números telefónicos-, respecto de las cuales el imputado pueda mantener comunicaciones a través del teléfono de línea fija de acceso público, lo que deberá establecerse dentro de un marco de razonabilidad, horario y duración".
Las únicas personas que puedan visitarlo personalmente, sean las mismas que figuren como autorizadas para mantener comunicaciones con Alvarado por la línea fija del penal.
También se estableció que esos encuentros " deberán realizarse en espacios de visitas con blindex de por medio".