Dos pitbulls atacaron a beba de 18 meses: quedó grave y lucha por su vida
Fue cuando iba con una prima y su abuela al kiosco. Al pasar por una casa las mordieron los animales. La dueña dijo que ya lo habían hecho con ella.
Una beba de 18 meses está internada en cuidados intensivos del hospital de niños de Santa Fe tras ser atacada por dos perros de raza pitbull. Le provocaron lesiones óseas y pulmonares. Su abuela, que intentó defenderla, sufrió mordeduras en la cara, el cráneo y en piernas y brazos.
“Están esperando que evolucione bien para mandarla al quirófano”, dijo Candela, mamá de la beba a Aire de Santa Fe. “Lo único que quiero es que se haga justicia, que la justicia actúe como tiene que actuar”, agregó
El director del hospital de Niños Orlando Alassia, Pablo Ledesma, informó que la beba debido al ataque sufrió "fracturas costales, en más de una, y las fracturas costales le provocan un hemoneumotórax".
Esas lesiones le generaron "un tórax inestable, motivo por el cual desde su ingreso al hospital está en la unidad de cuidados intensivos con asistencia respiratoria mecánica" y que está "compensada hemodinámicamente".
Todo sucedió el sábado alrededor de las 22, cuando una mujer de 46 años se dirigía hasta un kiosco del barrio Santa Rosa de Lima a comprar un jugo en compañía de sus nietas de ocho años y un año y medio.
Pasaron por el frente de una casa cuyos propietarios tienen dos perros pitbulls, que en ese momento se habían escapado hacia la calle y las atacaron. La mujer intentó defender a la nena máschica pero no pudo evitar que fuera agredida. La de 8 años, que es también nieta de la mujer y prima de la nena atacada, escapó corriendo al advertir la embestida de los perros y resultó ilesa.
Jaquelina Insaurralde, abuela de las nenas, relató: “Cuando sentí la presión del perro en la mano, lo único que hice fue agarrar fuerte a la bebé, porque el animal se paró en dos patas. Lo único que hacía el perro era apretarme fuerte, traté de que no me tiraran al piso”.
“Me caí y trate de cubrirme la cara con la mano, agaché la cabeza para no soltar a la nena e intenté apartar a uno de los perros. En ese momento me agarró la cara”, explicó la mujer, fue trasladada al hospital José María Cullen, donde recibió asistencia médica inmediata ante las lesiones recibidas.
“Ni siquiera tengo fuerzas para mirarme al espejo, solo quiero salir de acá para estar con mi nieta”, aseguró.
Jaquelina sostuvo que, al momento del ataque, quedó “paralizada” al ver a los perros. “Si no la soltaba se la comía. Intenté con todas mis fuerzas protegerlas. Cuando lo vi ya lo tenía encima”, aseguró.
Intervino la Sección Ecológica de la policía, los dueños de los perros debieron declarar en una comisaría y se inició una investigación penal. El municipio verificó que los animales no estaban inscriptos en el registro creado por ordenanza para la tenencia de animales potencialmente peligrosos.
La dueña de lso perros
Érica, la dueña de los perros explicó que previamente había sido mordida por uno de los animales y había solicitado que lo retiraran de su casa. Pero le informaron que no era posible debido a que el perro era considerado un perro de hogar. “Tengo dos saturaciones en la cabeza y 18 puntos de cada lado”, señaló en declaraciones a Aire de Santa Fe.
“Escuchamos gritos afuera, y ahí vimos cómo estaba atacando a la mujer y a la nena. Mi esposo se metió para sacarle el perro de encima y un vecino lo ayudó a meterlo adentro”, agregó.
Contó que visitó uno de los hospitales para conocer el estado de salud de la beba, aunque aseguró que le permitieron ingresar. “Me comuniqué con la hija y me puse a disposición por si necesitaba algo. Estaba tan angustiada que me descompuse y llamé a la policía”, dijo.
“Soy responsable y estuve al tanto de todo lo que pasó”, concluyó.