Mediante un operativo que se efectuó en el oeste del conurbano bonaerense, los pesquisas detuvieron a un joven, que era buscado por haber asesinado a un gasista, a quien agredió a balazos debido a problemas barriales y en una pelea callejera. El suceso, que se registró el 10 de octubre, alcanzó trascendencia y, en aquel momento, fue publicado en forma exclusiva por cronica.com.ar. Otro de los casos policiales más impactantes de la jornada.

Voceros judiciales revelaron a cronica.com.ar que el individuo, llamado Lautaro, de 20 años, figura sindicado de ser autor del crimen de la víctima, identificada oficialmente como Diego Sosa.

De acuerdo a lo agregado por los informantes, el sospechoso resultó apresado luego de haber sido sorprendido en el cruce de Los Nogales y Juan García del Río, en un procedimiento que concretaron los servidores públicos destinados en la comisaría 1ª Norte de dicho distrito, con las directivas impartidas por el doctor Claudio Gabriel Fornaro, fiscal de la Unidad Funcional Temática de Homicidios de los tribunales de la jurisdicción.

Según los trascendidos, al ver a los uniformados, el sujeto intentó escapar por las viviendas aledañas, pero finalmente culminó reducido por las autoridades, comprobándose que, en la mencionada fuga, había arrojado una pistola Browning nueve milímetros, que se cree que habría sido utilizada para matar a la víctima. 

Miembros de la Dirección Departamental de Investigaciones (D.D.I) de la zona habían colaborado en el desarrollo de las primeras diligencias.

Consta en el expediente judicial que, el 16 de octubre, los pesquisas policiales habían llevado adelante un allanamiento, en una vivienda, oportunidad en la que consiguieron incautar una pistola Colt 11.25, y además municiones de este calibre y también de nueve milímetros.

Así fue el asesinato

Tal lo publicado en su momento, el hecho se produjo en la madrugada del 10 de octubre y el hallazgo del cadáver del trabajador aconteció cuando los integrantes del Comando Patrulla (C.P.) recibieron una denuncia en el número telefónico de emergencias 911, la cual hacía referencia a una persona fallecida, en el cruce de Adolfo Berro y Guatemala. 

Al arribar a la mencionada esquina, los funcionarios observaron el cuerpo del gasista, de 35 años, que yacía tendido boca abajo y que tenía manchas de sangre.

Peritos de la delegación local de la Policía Científica, al ser convocados por las autoridades de la Justicia, revisaron al occiso y entonces lograron determinar que presentaba múltiples heridas de arma de fuego (en la espalda, en la pierna izquierda, en una de las axilas y en el brazo derecho), a la vez que secuestraron vainas servidas de un arma calibre nueve milímetros. 

Intervino en la causa penal, que preventivamente se mantiene caratulada “Homicidio”, el Juzgado de Garantías N° 3 de la zona.

Por F.V. 

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