Silvia Pérez Vilor, mamá de Anahí Benítez, quien fue retenida, drogada, violada y estrangulada en 2017, denunció a Crónica HD que recibe "amenazas" y es víctima de "escraches" en redes sociales tras conocerse la condena a prisión perpetua de Marcos Bazán (37) por el femicidio de la adolescente de 16 años cometido en la reserva Santa Catalina de Lomas de Zamora"Si llega a quedar firme la sentencia, no sé qué será capaz de hacer esta gente", advirtió la mujer.

Según contó Pérez Vilor, el fiscal de juicio Hugo Carrión recibió "amenazas de muerte", así como el entrenador de Bruno, el perro de la brigada canina de Escobar que detectó el rastro odorífero de Anahí dentro de la casa de Bazán y la presencia del propio imputado en la fosa donde hallaron el cadáver de la víctima, a 235 metros de su vivienda.

La mujer también aseguró que fue víctima de "intimidaciones y escraches" en redes sociales por parte de los amigos y allegados del condenado. "Son amenazas a futuro, cuando la sentencia quede firme. Si eso llega a ocurrir, no sé de que será capaz de hacer esta gente", advirtió. En ese sentido, indicó que escuchó "tres tiros al aire cerca del portón" de su casa "dos noches seguidas". "Me llamó mucho la atención. Es como una especie de intimidación", añadió.

"En redes sociales, los allegados de Bazán me acusan de mentir y de que no hay pruebas de su vinculación con Marcelo Villalba(43), el otro acusado cuyo ADN fue hallado en el cuerpo de la víctima, dijo Pérez Vilor al tiempo que puntualizó: "Hubo mucho despliegue de dinero en avionetas y carteles, no sé quien puso ese dinero. Estoy segura que hay una persona con mucha plata detrás de todo esto por lo que se gastó en defender a Bazán".

"No es Bazán como persona sino lo que él sabe", afirmó la mujer. 

El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 7 de Lomas de Zamora condenó a Bazán hace algunas semanas como "coautor" de los delitos de "privación ilegal de la libertad agravada y homicidio triplemente agravado por alevosía, criminis causa y por mediar violencia de género" (femicidio), y como "partícipe necesario" de un "abuso sexual agravado por acceso carnal".

La hipótesis de la fiscalía es que Anahí conocía a Bazán por el interés que ambos tenían por la naturaleza y por sus inclinaciones artísticas y que, en ese contexto, el imputado la secuestró, la retuvo en su casa, la drogó con "burundanga" y ahí fue violada por Villalba.

Para los investigadores, al ver la búsqueda policial que se desarrollaba por la joven, los acusados decidieron asesinarla para ocultar los delitos que habían cometido.

La querella también había solicitado la prisión perpetua para Bazán, mientras que la defensa había pedido la absolución por falta de pruebas y al sugerir que era una "causa armada".

Anahí fue vista por última vez el 29 de julio de 2017 cuando salió de su casa de Parque Barón, en Lomas de Zamora, para dar un paseo y el 4 de agosto su cadáver fue encontrado desnudo, con lesiones cortantes y golpes en la cabeza, enterrado en la Reserva Natural Santa Catalina.

La autopsia determinó que fue estrangulada, que le habían suministrado drogas y que en esas condiciones había sido abusada.