Las redes sociales son una herramienta utilizada por millones de personas alrededor del mundo para intercambiar el material más diverso: imágenes, videos, noticias de actualidad, situaciones cotidianas y bromas circulan por la web a fuerza de “me gusta”, comentarios y reposteos.

Más allá del material chistoso que circula, hay un nicho que está comenzando a explotarse cada vez más: el paranormal. En el último tiempo, la red social TikTok, se convirtió en el escenario ideal de cientas de cuentas que comparten material realmente perturbador, a cargo de usuarios apasionados por la temática.

Apariciones de siluetas extrañas, movimientos de objetos sin que nadie los toque, ovnis y duendes, son algunos de los hechos protagonistas de imágenes y videos que circulan y que son consumidos por millones de personas alrededor del mundo.

En este caso, fue la usuaria @celesteirojas18 quien compartió un material filmado en el interior de un hospital, que provocó el estremecimiento total de sus seguidores. En el clip, puede verse a la cámara avanzar por los pasillos del nosocomio hasta llegar a la puerta del ascensor, que comienza a abrirse por sus propios medios, sin registrarse ninguna persona física en el lugar.

Luego, con el correr de los segundos, pueden verse varios carritos de desayuno y con insumos médicos que empiezan a moverse sin que nadie los toque, haciendo ruidos realmente tenebrosos.

El video superó el millón de reproducciones y tuvo más de 2.200 comentarios: “No lo voy a ver porque son las 23:00 pm y me da miedo”, “Eso no es normal!!..mi esposa es enfermera y me dice que es normal para ellos ¡Yo saldría corriendo!”, “Yo ni loca me animo A andar sola por ahí”, “Yo sí te creo. La cantidad de energías que los hospitales guardan es inmensa”, escribieron algunos usuarios.

También hubo quienes le pusieron humor: “Por lo menos es ordenado, volvió a poner el carrito en su lugar”, “El fantasma: ‘Perdón me tropecé lo pondré en su lugar’”, “El fantasma: ‘Llevaré ésta máquina para hacerme un estudio. Ah ya me siento bien, mejor lo dejo en su lugar nomás’”, bromearon.

Y no faltaron los escépticos que aseguraron que el material no era verídico: “Su compañero empuja y ella nunca pone la cámara hacia la derecha, eso le da tiempo al compañero de esconderse, y lo mismo para el ascensor”, “Evidente que alguien empuja y se esconde detrás de la otra máquina”, “Curiosamente siempre van grabando donde pasan las cosas y tienen los ángulos perfectos”, opinaron.