El poder de las mancias: un viaje de introspección para predecir el futuro
Un informe especial para entender mejor sobre esta práctica de la cual se escucha hablar mucho, pero de la que se conoce realmente muy poco.
Por Marian Lutz
Invest. Dogma-Argentina
Según el diccionario de la Real Academia de la Lengua, mancia significa "adivinación" o "práctica de predecir". Proviene del griego "manteia". Las mancias son técnicas que buscan la predicción del futuro a través de distintos medios u oráculos, algunas datan de muchos siglos atrás y otras han surgido junto con la evolución de la humanidad y el avance de la tecnología. En diversas civilizaciones se otorgaba gran importancia al conocimiento del futuro o los hechos importantes que acontecerían en determinadas áreas, así que buscaban las respuestas a sus dudas en los oráculos para luego tomar decisiones sobre la base de lo dicho por ellos.
Más allá de la clase social, la raza o la religión que se profese, cualquier persona puede recurrir a especialistas en adivinación, con la curiosidad de conocer más acerca de su vida, su pasado, su destino, algún acontecimiento venidero o simplemente para buscar la respuesta de hechos que les causan desconcierto. En el mundo mágico la rama de las artes adivinatorias es considerada como la más imprecisa que existe y es practicada de distintas formas en las que también varía el nivel de precisión.
Existen infinidad de diferentes mancias que se vienen utilizando desde el inicio de la civilización. Algunas como la cartomancia, la runamancia, el I Ching, el péndulo y la quiromancia son muy conocidas, mientras que existen otras muy curiosas y que pocos conocen, como la alectomancia, la croniomancia o la rasodomancia.
Hablemos de historia
Los sabios de pueblos antiguos como los caldeos, los babilonios o los árabes utilizaban estas técnicas para hacer predicciones. A ellos acudían personas para recibir consejos y una guía para las decisiones importantes que tenían que tomar en sus vidas. Desde campesinos hasta reyes y militares buscaban dicha ayuda.
En la Edad Media la quiromancia (adivinación del futuro por medio de la lectura de las líneas y los signos de la mano), fueron disciplinas muy respetadas que se estudiaban en universidades, pero con la aparición de la ciencia racional quedaron relegadas, junto con la astrología y la alquimia, a los baúles de la historia, como si se trataran de reliquias de épocas menos racionales. Esto provocó que sólo estuviese en conocimiento de unos pocos y de manera muy limitada, y en custodia de aquellos que la practicaban. Con la caída del dominio de la religión llegó la hegemonía de la ciencia con la época de las luces, considerando todas estas artes como una mentira al no ser basadas en métodos científicos.
Desde comienzos del siglo XXI, la gran fisura entre la ciencia y el misticismo se ha estrechado considerablemente. Cada vez más la ciencia confirma más que desmiente fenómenos "irracionales": se han medido los cambios que se producen en la actividad de las ondas del cerebro durante la meditación; el aura humana puede fotografiarse con una cámara Kirlian e incluso las partículas atómicas, que son unidades básicas del universo, parecen ordenarse por sí mismas de acuerdo con las expectativas de quien las percibe.
¿Por qué debe interesar?
Se está ante el comienzo de una nueva era en la que las personas se están cansando de la superficialidad del sistema consumista actual y han empezado a interesarse más por lo humano y espiritual, buscando "algo más" que realmente les ayude a vivir la vida de forma más plena y feliz. Así es como han tomado auge las investigaciones sobre temas esotéricos, conocimientos que las religiones y los gobernantes han ocultado durante muchos años, a fin de poder mantener el dominio de las cosas. ¿Cómo? Mientras, por un lado, expresaban estas ciencias como algo oscuro, por detrás seguían investigando, practicando y beneficiándose de tales conocimientos. Gracias a las nuevas tecnologías, a las redes sociales y a Internet, hay un fácil acceso a una gran cantidad de información que permite investigar y aprender sobre variados temas.
Está claro que se necesita de una selección objetiva y que no toda la información es de calidad. Pero el tener acceso a todo este conocimiento hace que se pueda descubrir cosas muy valiosas que ayuden a romper varios esquemas preconcebidos. Ver las cosas desde otro punto de vista y permitir la apertura a una vida que sea la que cada uno elige, y no la que otros hayan elegido. Una vida que realmente satisfaga esas necesidades. Puesto que cada persona es única y tiene motivaciones diferentes, y cada uno debe buscar aquello que realmente sienta. Lo que en verdad importa es qué cosas hacen sentir bien a las personas, qué tipo de vida es el que mejor se adapta a cada individuo. Aunque muchas veces ni siquiera esa persona lo sabe con certeza.
El valor de la mancia
Una mancia puede ayudar a descubrir cosas de uno mismo de las que no se era consciente, acompañar la toma de decisiones o desarrollar habilidades que resultan útiles para el día a día. ¡Por eso mismo hay que atreverse a descubrir alguna mancia!
Usarlas para el bien
Probablemente muchas personas se ven sorprendidas por la cantidad y variedad de mancias existentes. El brujo o bruja (o llámelo como quiera), por medio de estas, puede ver muchas cosas y averiguar otras. En la Antigüedad se utilizaban cientos de mancias más. Cada brujo o bruja, personas de bien por aquel entonces, cuando no eran sistemáticamente denostados, desarrollaba una mancia en particular y la enseñaba a sus discípulos. Para quienes quieren verdaderamente alcanzar ese estatus, les vendría bien conocer todas estas cosas, saber qué son las mancias es importante. También poder utilizar alguna de ellas en profundidad.
Relación con el poder divino
Se considera que esta manera de pensamiento en el género humano es divina y que es compartida con otras personas. Quienes utilizan las mancias o adivinación entran en un trance durante el cual toman contacto y hacen conexión con seres superiores, obteniendo de ellos su conocimiento. Desde su origen en la antigua Grecia, se considera que aquellas personas que dominan las diferentes formas de mancias o el acto de la adivinación son personas que, una vez en estado de trance, desean conocer o predecir el futuro en una línea de tiempo.
Quiénes las utilizan
Siempre se ha escrito o dicho que quienes pueden ver el futuro o utilizar las mancias son aquellas personas que poseen desarrollado el tercer ojo, y se las denomina clarividentes. Sin embargo, hay quienes piensan que cualquier persona con una mente limpia y un deseo de ayudar a los demás puede utilizar las mancias. No hace falta decir que es un tema que se debe tomar muy en serio y que se debe aprender su funcionamiento, porque se están moviendo energías y quien lo haga deberá asegurarse de que no son fuerzas energéticas oscuras.
FUENTE: www.dogma-argentina.com.ar // Fotos archivo
M.L