Internet está repleto de relatos de personas comunes y corrientes que se hicieron millonarias de la noche a la mañana, ya que jugaron a la lotería porque tuvieron desde una "corazonada", señales del destino y hasta por sueños que protagonizaron mientras dormían. Sin embargo, hay algunas historias que superan la realidad y parecen dignas de una película de Hollywood

Está más que claro que todos los juegos de azar entrecruzan diferentes caminos que, en muy pocas oportunidades, dan como resultado el esperado triunfo monetario. Si bien son pocos los "bendecidos" por la suerte, miles de personas al rededor del mundo continúan apostando y mantiene la esperanza de cambiar su fortuna

Es en este contexto, una joven mujer latina, que emigró a Estados Unidos, se quedó con el enorme pozo acumulado de la quiniela Norteamérica luego de que un inesperado impulso la llevó a comprar un ticket en el supermercado

La increíble historia de la nueva millonaria. 

La corazonada que la volvió millonaria 

La protagonista de esta impactante historia se llama  Elena Penaloza, quien es una inmigrante hispana que se instaló hace algunas semanas en la ciudad de California, Estados Unidos. El principal objetivo del nuevo hogar familiar fue mejorar las condiciones de vida de los hijos, según dijo. Sin embargo, nunca se esperó que el destino le tenía una enorme sorpresa que le cambiaría rotundamente la vida. 
En medio de la mudanza, la mujer comenzó a sentir una picazón inmensa en las manos. Si bien trató de parar esta incómoda sensación con cremas, agua y otros métodos, la comezón se mantuvo latente durante muchos días y, finalmente, llegó a la conclusión de que era una señal del destino
Según la creencia popular que se tiene en varios países de América Latina, la picazón sin motivo o la alergia en la mano derecha es augurio de buena suerte. Más precisamente, se piensa que hace referencia a llegada de dinero, grandes objetos materiales o una nueva propiedad. 
Llena de esperanza y fe, Penaloza fue hasta el supermercado más cerca de su casa y compró una clásica raspadita de Estados Unidos que se llama "Diamond 8’s Scratchers", la cual cuesta $10 dolares ($3498 pesos argentinos) y entrega millones en premios. Luego de adquirir el billete, volvió a su casa y, mientras estaba con la familia, raspó cada uno de los cuadraditos que la conformaban. 
Poco a poco, tras descubrir los espacios del ticket, la joven mujer inmigrante se llevó la gran sorpresa de que ganó el premio mayor de la lotería que superaba el millón de dólares, es decir, $349.866.300 millones de pesos argentinos
Rápidamente, la protagonista de la historia y su hija mayor, Elena, fueron a retirar el pozo acumulado de la lotería estadunidense y sorprendieron a todo el mundo al contar su historia. En cuanto al fin del premio, la señora aseguró que comprara una casa, sueño que tiene desde que decidió emigrar a Estados Unidos, y se va a enfocar en darle una mejor vida a sus hijos.