En el mundo existen una variedad de platos exóticos y polémicos. Uno de ellos es la sopa de murciélago. Esta comida tiene una mala reputación por su asociación de que la pandemia de Covid-19 se originó porque personas en China comían estos animales. Sin embargo, hasta el momento no hubo confirmación ni pruebas contundentes de que eso haya sido así. 

A pesar de su fama aún es preparada en distintos establecimientos gastronómicos. En este caso, una youtuber se filmó comiendo esta  sopa y fue repudiada en las redes sociales. Tras la viralización del vídeo, la joven fue detenida y acusada de "posesión de cadáveres de animales salvajes protegidos" y por violar "la Ley de Delitos Informáticos".

La protagonista de este repudiado suceso es la famosa influencer tailandesa, Phonchanok Srisunaklua. La joven subió a su canal de Youtube "Gin Zap Bep Nua Nua" (Comer picante y delicioso) un vídeo, que luego fue eliminado, donde se la ve comer este comida exótica.

En la grabación, la muchacha, que también es profesora, aparece degustando el plato, que contiene tomates cherry y murciélagos. Srisunaklua aseguró que el sabor era "delicioso" y comentó que sentía los "dientitos muy suaves" y que los huesos del animal eran fáciles de masticar

No obstante, muchos usuarios de las comentaron que los más desagradable de la filmación fue el momento en el descuartizó al animal, sumergió un pedazo del murciélago en una salsa picante, llamada Nim Jam, y lo comió frente a la cámara. 

El clip se volvió rápidamente y los usuarios salieron a criticarla, no sólo por poner en riesgo su propia salud al probar este plato exótico, sino que muchos la acusaron de haber expuesto a su comunidad a un nuevo virus como el SARS-CoV-2.

Tras la viralización de la grabación, la policía de Tailandia arrestó a la reconocida influencer y la acusó de "Posesión de cadáveres de animales salvajes protegidos" y "violar la Ley de Delitos Informáticos". 

Según los informes policiales, la youtuber reconoció que era la primera vez que probaba ese platillo y que compró las especies protegidas en un mercado, que está cerca de la frontera con Laos. En tanto, la influencer podría ir cinco años de cárcel o recibir una multa superior a los 13 mil dólares.

Por último, después de recuperar la libertad, mientras avanza la causa en su contra, la joven pidió disculpas en las redes: "Lamento haberlos hecho sentir mal. No sé si me perdonarán por lo que he hecho. Lo siento mucho. Me equivoqué", sentenció.