El suceso que causó impacto mundial en el mes de septiembre, sin dudas, tuvo que ver con el fallecimiento de la reina Isabel II, la monarca británica que supo estar al frente del poder durante siete décadas de manera ininterrumpida. Sin embargo, el final de su vida llegó a sus 96 años de edad pero poco se supo de la razón de su defunción.

En el día del deceso de la emperatriz, desde el Palacio de Buckingham emitieron un escueto comunicado den de decía que "La Reina murió pacíficamente en Balmoral esta tarde. El Rey y la Reina Consorte permanecerán en Balmoral esta noche y regresarán a Londres mañana". En los días previos, los médicos que la atendieron alertaron por el deterioro de su salud.

El tiempo siguió su marcha y todo el Reino Unido continuaba conmovido por la noticia del fallecimiento de la monarca más longeva del mundo, y a raíz del suceso que sacudió al territorio, se declaró 10 días de luto. El féretro con sus restos se pasearon por las calles de los lugares que conforman Gran Bretaña, hasta el día de su entierro, el 19 de septiembre.

Lo cierto es que transcurrido todo el acto ceremonial, en las últimas horas salió a la luz un documento revelado por la National Records of Scotland en el que se detalló el horario y el motivo del fallecimiento de Isabel II.



La documentación indicó que Elizabeth Alexandra Mary , más conocida como la reina Isabel II, falleció el 8 de septiembre a las 3.10 pm, en el Castillo de Balmoral, a razón de su notoria "vejez" por sus 96 años de vida.

El acta de defunción



También se detalló que la única de sus cuatro hijos que estuvo presente en el día de su defunción fue la princesa Ana del Reino Unido, quien fue la que notificó en el documento el momento del fallecimiento de su madre. Una vez revelado el misterio, se supo que los tres hijos restantes fueron llegando a la residencia real: El ahora rey Carlos III llegó acompañado de su esposa, Camila; el conde de Wessex, Edward; y el principe Andrew, duque de York