Polémica en Brasil por supuesta llegada de la segunda ola de coronavirus
La situación sanitaria se agravó por el aumentó de contagios del virus Covid-19 en Manaos, la capital del estado brasileño Amazonas.
El aumento de los casos de coronavirus en Manaos, la capital del estado brasileño Amazonas, provocó una profunda polémica dentro de la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz), el mayor centro de investigación científica y tecnológica de América latina, informó hoy la prensa brasileña.
El debate gira en torno de si ese rebrote debe ser considerado como una segunda ola de contagios o no, y divide a los científicos acerca de las medidas recomendables y su alineamiento o no con la política del gobierno del presidente Jair Bolsonaro, reacio a las cuarentenas, según el diario Folha de Sao Paulo.
De acuerdo con la corriente que sostiene el investigador Jesem Orellana, la segunda ola ya está en marcha y no es necesario esperar que llegue al pico para advertir sobre el impacto que puede causar, por lo que recomendó el aislamiento estricto, medida apoyada por el alcalde Arthur Virgílio y resistida por otras autoridades.
“Dado que aumentó el número de casos confirmados de Covid-19 y de ingresos hospitalarios en la ciudad a causa de la enfermedad, Manaos ha venido tomando medidas para proteger a la población”, dijo la oficina de prensa de la alcaldía.
En cambio, Marcelo Gomes, coordinador del sistema Infogripe desarrollado por Fiocruz y el Ministerio de Salud, afirmó que “hablar de segunda ola puede resultar adecuado más adelante, en caso de un crecimiento descontrolado, de una aceleración de los contagios”.
“No estamos en esa fase, es un crecimiento lento; no es una situación de pánico porque no estamos en la situación anterior, pero merece cuidado”, dijo Gomes a la agencia noticiosa estatal Brasil.
Desde el comienzo de la pandemia, Brasil sumaba 4.777.522 casos confirmados de coronavirus (32.058 en las últimas 24 horas) y 142.921 muertes por la enfermedad (863 nuevas), informó este martes el Ministerio de Salud.
Con esas cifras, continuaba siendo el tercer país con más contagios y el segundo con más muertes acumuladas.